_
_
_
_

Violentos incidentes en Sevilla en la huelga general de los astilleros públicos

La totalidad de la plantilla que componen os astilleros públicos -10.000 trabajadores- secundó ayer la huelga contra el plan de reconversión propuesto por la Divisiónde Construcción Naval (DCN), que prevé, entre otras cosas, la reducción de 4.200 empleos. La huelga se acompañó de manifestaciones de protesta, que acabaron en violentos enfrentamientos en Andalucía, donde dos personas resultaron heridas leves. Hoy habrá una nueva sesión de negociación, que se desarrollará en un ambiente de pesimismo ante la lejanía de las posturas de dirección y sindicatos.

La respuesta a la convocatoria de paro realizada por CC 00, UGT, el sindicato gallego CIGA, CAT y el vasco LAB fue total. La crisis de Astilleros Españoles explotó en Sevilla con una batalla campal frente al Palacio de San Telmo, informa Juan Méndez.

Los trabajadores del sector naval andaluz (hay instalaciones en Sevilla, Cádiz y Puerto Real) y las fuerzas antidisturbios de la policía pusieron fin a una manifestación contra el cierre de las factorías. Durante la protesta se quemaron neumáticos y lanzaron piedras ante "la puerta de Chaves". La contundente carga policial derivó en una guerrilla urbana por las calles del barrio de Los Remedios. Fueron veinte minutos de botes de humo y pelotas de goma frente a piedras, trozos de acera y tuercas lanzadas con tirachinas. Dos trabajadores resultaron levemente contusionados y un policía se torció el tobillo. Los trabajadores anunciaron nuevas protestas para los próximos días 14 y 24.

Pasadas las 10 de la mañana unos 2.000 trabajadores de los Astilleros de Sevilla, Cádiz y Puerto Real iniciaron una corta marcha para manifestarse ante las puertas del Palacio de San Telmo, sede de la presidencia de la Junta de Andalucía. Una avanzadilla tomó al asalto la puerta del antiguo seminario hispalense y prendió media docena de neumáticos. Tras el humo, una lluvia de piedras y tuercas se estrelló contra las ventanas.

La reacción policial fue tan rápida y enérgica como la quema de neumáticos, y su resultado, contundente. La Policía disolvió a los 2.000 manifestantes a fuego de abundante material antidisturbios. Tanto el Partido Andalucista (PA) como Izquierda Unida-Los Verdes (IU-LV) han exigido la dimisión de la delegada del Gobierno, Amparo Rubiales. Esta última negó que la acción policial haya sido desme,surada y declaró sentirse orgullosa de que las citadas organizaciones políticas hayan solicitado su dimisión por este motivo.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves -que en el momento que ocurrieron los hechos se encontraba reunido con su gabinete en el Monasterio de La Cartuja-, lamentó "las actitudes violentas de algunos incontrolados". El presidente señaló en una comparecencia ante la prensa que la Junta no está de acuerdo con el plan de competitividad presentado por la DCN y considera que debe ser modificado en la negociación con los sindicatos, informa Isabel Pedrote.

En Galicia, los trabajadores de Astano y Barreras se manifestaron en Ferrol y Vigo sin incidentes, informa Primitivo Carvajo. Industria ya ha descartado la privatización de Barreras, con lo que desaparece el principal motivo de la protesta. Los dirigentes sindicales han anunciado, no obstante, que proseguirán sus movilizaciones en solidaridad con el resto del sector. Los trabajadores de Astano consideran fundamental el mantenimiento del taller de reparaciones del astillero "como un colchón ocupacional para cuando falte carga de trabajo". En los planes de Industria subsiste el criterio de cerrar dicho taller.

En Cantabria paró Astilleros de Santander (Astander), informa Jesús Delgado. Con el ajuste, Astander perdería la mitad de su plantilla. En Asturias pararon todos los trabajadores de Juliana Constructora Gijonesa, informa Javier Cuartas. Y en Bilbao, unas 2.000 personas se manifestaron por las calles secundando la huelga. El plan para La Naval de Sestao (Vizcaya) supone un excedente superior a los 1.300 empleos,informa Aitor Guenaga.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_