Astilleros: última reestructuración
CARLOS MARTÍNEZ DE ALBORNOZ BONETSegún el autor, el Plan Estratégico de Competitividad se basa en dos principios: la voluntad de viabilidad y la estimación realista de las condiciones externas
Nos enfrentamos a la última oportunidad de hacer viables las empresas públicas españolas de construcción naval, la mayoría de origen privado, protegidas por el Estado desde hace varias décadas, que han de estar en el mercado en condiciones de libre competencia y sin ningún tipo de ayuda estatal a partir de 1998. El Plan Estratégico de Competitividad (PEC) para su reestructuración se basa en dos principios capitales: la voluntad de viabilidad del grupo empresarial, la estimación realista de las condiciones externas y las auténticas posibilidades de actuación, y la negociación de su planteamiento.Creemos firmemente en la viabilidad de esta industria como exponente de un país desarrollado. Y apostamos por su mantenimiento futuro, no sólo inmediato sino en los próximos ciclos de bonanza y declive. Pero esto exige el pertrecharse ya de lo necesario y no dejarlo para el momento crítico:
Para alcanzar la viabilidad estable, el PEC parte de un análisis de la situación actual y sus antecedentes. El acuerdo OCDE/Corea del Sur, que afecta al 80% de la construcción naval mundial, impone la libre competencia sin subsidios a partir de enero de 1996 y concede a los astilleros públicos españoles un periodo transitorio de dos años. Además de este condicionante, se ha tenido en cuenta en la elaboración del PEC otro hecho objetivo: el mercado, en él momento actual, presenta un exceso aproximado, del 20-30% de capacidad de oferta mundial sobre la demanda, desequilibrio que no mejorará a largo plazo, sino que posiblemente se acentuará. Este desfase ha causado, y a un descenso del precio de los barcos que previsiblemente se mantendrá unos años.
Por esta razón, en Europa se están cerrando astilleros. Hecho éste que viene a desmentir determinados argumentos indicadores de que los astilleros europeos están aumentando su capacidad. La capacidad de construcción anual en Europa no ha crecido desde 1987.
En este entorno, la respuesta competitiva de nuestras empresas tiene que desarrollarse con arreglo a sus auténticas posibilidades. Hay que contar con los tres grandes problemas que nos afectan: importantes pérdidas en las construcciones de buques, exceso estructural de plantillas y elevados costes financieros. Y también hay que contar con nuestra verdadera capacidad competitiva actual y potencial.
La crisis de los años setenta llevó a una reestructuración de la construcción naval en toda Europa que produjo la salida de un 62% de las plantillas entre 1975 y 1990, y que en España fue similar. A partir de 1990, nuestros competidores, ante el panorama que se iba creando de descenso progresivo de ayudas y de precios, adoptaron nuevas medidas, entre ellas, la mejora substancial de la productividad seguida de la reducción de los excesos estructurales en las plantillas, En Europa han salido de los astilleros, desde ese año, 54.000 trabajadores, que supone el 31 % de las plantillas. En España, en cambio, de los as tilleros públicos sólo han salido 800 personas, el 7%, en el mismo periodo, lo que sin duda ha repercutido en nuestra pérdida de competitividad.La productividad alcanzada por nuestros competidores europeos en estos últimos años, junto con el modelo industrial adoptado, les permite realizar una ventas de 25 millones de pesetas por empleado en nuevas construcciones y de 30 millones de pesetas en unidades offshore para la explotación petrolífera. Mientras tanto, en nuestros astilleros la facturación media por empleado es de sólo ocho millones de pesetas anuales que se traducen en pérdidas de casi tres millones de pesetas anuales por empleado.
El PEC pretende corregir el desfase entre ventas y número de empleados de forma o ue un nivel de facturación de 90.600 millones de pesetas anuales -establecido con criterio prudente o conservador- permita un balance positivo.
La reestructuración es por tanto, necesaria. Y también posible. Los importantes logros alcanzados durante los últimos ocho años, nos permiten dar el inevitable nuevo salto. El procesó de modernización de nuestras empresas nos ha hecho obtener calidad certificada en todos los centros de producción, productividad triplicada desde 1987 y fiabilidad y presencia en el mercado. Desde 1991 se han invertido 47.000 millones de pesetas en desarrollo tecnológico y mejora de instalaciones. Hoy, nuestro grupo, tiene niveles tecnológicos similares a nuestros competidores más avanzados y suministra tecnología de diseño y construcción de. buques a importantes astilleros norteamericanos y europeos., Sin embargo, en otros aspectos nos hemos alejado del nivel competitivo actual y futuro.
El PEC trata de salvar definitivamente esta desventaja, Para ello, adicionalmente al redimensionamiento del grupo y su saneamiento financiero, desarrolla ocho programas-marco de actuación que abordan una profunda reforma y mejora de toda la estructura empresarial: reforma del proceso integral de ingeniería, diseño de productos competitivos, transformación de los procesos de producción, optimización de los aprovisionamientos e industria auxiliar, fortalecimiento de la acción comercial, implificación de los circuitos operativos y de información. Rediseño de las relaciones laborales e innovación tecnológica. El PEC, fundamentalmente, selecciona los negocios en los que el grupo de astilleros públicos debe estar en el futuro. Hoy, el grupo sigue seis líneas, de negocio, herencia histórica más que resultado de decisiones empresariales coherentes. Hay que cambiar este esquema.
Existe una gran diferencia comercial y productiva entre los buques grandes, desde unas 40.000 tpm, cuyo ámbito de contratación es mundial y con la competencia principal situado en Lejano Oriente, y los menores de este tamaño, que tienen una de manda más regionalizada y por tanto unos competidores europeos. Los astilleros dePuerto Real y Sestao corresponden al primer modelo y los de Vigo (Ba rreras(, Gijón (Juliana) y Sevilla al segundo. Estos últimos requieren una gestión diferente de los primeros, más flexible y persona lizada, con menor estructura, y podrían tener menor acomodo fuera del sector público. Por ello, el Plan propone la desinversión de los astilleros de Vigo y Gijón tras su saneamiento financiero, y su adecuación laboral y tecnológica, mientras que se propone cesar las actividades de construcción naval en Sevilla por la imposibilidad práctica de alcanzar su rentabilidad'a medio plazo. Y asimismo, señala la continuidad de los astilleros de Puerto Real y Sestao en la construcción de grandes buques, si bien con evolución hacia barcos de más valor añadido, jutno con la concentra ción en Puerto Real de las actividades de transformación de buques que se realizan hoy en Cádiz. En asociación Con estas actividades, se mantiene la fábrica de motores de Manises por su valor estratégico interno.El negocio de reparaciones es muy distinto de las nuevas construcciones y sufre una competencia de países de bajo coste de mano de obra. Los principales constructores mandial9s están desinvirtiendo sus astilleros de reparaciones. La propuesta del PEC de cese de actividades de reparación en Cádiz y desinversión de Astander es coherente con esta tendencia.Finalmente, el negoció offshore ofrece buenas perspectivas por lo que el PEC asigna al astillero de Ferrol (Astano) el seguimiento en este mercado, donde fue, pionero y hoy es líder.
De acuerdo con este planteamiento general, con respecto a las instalaciones en que se propugna cese o concentración de actividad, vamos a estudiar con los sindicatos qué actividades industriales de construcción naval o complementarias son viables para, en su caso, llevarlas a cabo conjuntamente con el MINER u las CC AA. Es evidente, por todo lo expuesto, que el PEC requiere un cambio de cultura que no puede desarrollarse sin consenso y la aportación activa de todos los trabajadores, por lo que queremos que sea negociado y pactado, con el único límite de la viabilidad del grupo en el escenario futuro.- es presidente de Astilleros Españoles.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.