Una organización feminista afirma que siete adolescentes de Tui han sido violadas por una pandilla de jóvenes

Al menos siete adolescentes, de 14 a 17 años de edad, han sido presuntamente violadas por una pandilla de jóvenes de la localidad pontevedresa de Tui, que vienen dedicándose a esas prácticas desde hace tres años, según informó ayer el grupo feminista Alecrín de Vigo, que también recrimina la pasividad de las autoridades frente a sus denuncias.Aunque por él momento sólo se han formalizado dos denuncias ante el juzgado, Alecrín asegura tener comprobadas las violaciones de otras cinco muchachas, una de ellas por cuatro jóvenes en la misma ocasión. "Creemos que hay varias chicas más que han padecido la misma violencia, pero, aún no se atreven a confesarlo", señalaron ayer portavoces de la organización feminista. Las víctimas son estudiantes de bachillerato, y sus presuntos agresores, de 19 a 23 años de edad, trabajan en distintas empresas de Tui.

Según Alecrín, las madres de las dos víctimas que se han identificado trataron de presentar denuncia ante el cuartel de la Guardia Civil, pero el sargento comandante del puesto, José Villar González, intentó convencerlas de que no lo hicieran, porque la denuncia se refería a hechos ocurridos un año antes "y va a ser imposible comprobarlos". Villar González, según las mismas fuentes, se comprometió a consultar con el juez, el modo de operar y trasladar luego a las víctimas el resultado de sus gestiones. No volvió a contactar con. ellas, aunque sí habría puesto sobre aviso a los presuntos violadores, según dicha organización.,

Alecrín informó del caso al gobernador civil de la provincia, José Álvarez de Paz, el pasado día 6 de julio, solicitándole la inmediata destitución del sargento y anunciándole al tiempo su intención de dar a conocer los hechos a la opinión pública. El gobernador pidió un plazo de una semana para investigar el caso, y comunicarles sus resultados. "A fecha de hoy, el sargento sigue al frente del cuartel, y nosotras, esperando la respuesta del gobernador, cuya pasividad denunciamos", dijo ayer la concejala viguesa del BNG Ana Gándón.

La mayoría de las jóvenes presuntamente violadas se lo han ocultado a sus padres "porque les da vergüenza y, porque los violadores son conocidos de las familias, como casi siempre sucede, y más en los pueblos", afirma Gandón. Esta circunstancia ha ralentizado el proceso de denuncias, aunque el grupo feminista vigués subrayó la particular incidencia a estos efectos que supone la permanencia de Villar González al mando del cuartel. Alecrín lo considera el principal obstáculo para el esclarecimiento de los hechos, ya que él, es el responsable de tomar la primera declaración a las denunciantes "y ya todas saben que ni siquiera es imparcial".

"No sé nada de eso", declaró a EL PAÍS Villar González, precisando que hace menos de un año que desempeña su destino en Tui. "Yo soy un profesional y bajo ningún concepto puede ser cierto lo que dicen de mí. Estoy tranquilo, pero no puedo comentar nada hasta que no me autoricen mis superiores", añadió.