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Artistas 'keynesianos'

Christo Javachef, exiliado búlgaro con aire de Woody Allen, y su pizpireta esposa, la francesa Jean Claude de Guillebon, hija de general y condesa, forman una especie de hidra de dos cabezas y constituyen un modelo de artistas keynesianos. El barón John Maynard Keynes, bestia negra de los neoliberales de hoy día, sostenía que en tiempos de recesión, para combatir el paro, el Estado debía destinar a obreros sin trabajo a la tarea de abrir zanjas en la calle y a otros en la misma situación para cerrarlas.

Esto es lo que ayer inciaron Christo y Jean Claude en Berlín con el Reichstag y en eso se basan sus obras más espectaculares. En 1976 crearon en la costa oeste de Estados Unidos una muralla, Running Fence, de 39 kilómetros de tela, que arrancaba en el Pacífico y atravesaba ranchos y montañas. En 1983 rodearon de tela rosa 11 islas de la bahía Vizcaya, en Miami. En 1985 envolvieron el Pont Neuf de París con un tejido color champán. En 1991 instalaron 3.100 sombrillas gigantescas en Japón y California.

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Desde que en 1971 Christo recibió una postal del Reichstag, se le metió entre ceja y ceja empaquetar el edificio más simbólico de Alemania. La broma le costará casi mil millones de pesetas, pero, en el más puro estilo keinesiano, dio trabajo a 1.500 personas y atraerá a Berlín a unos tres millones de turistas.

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