Fin de curso musical

Epígrafe]MÚSICA

En los jardines del Real Sitio de San lldefonso, "lo más europeo del barroco español", como decía el marqués de Lozoya, se celebró anteayer la clausura de curso de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, de la que es presidenta de honor la Reina, presente en el acto acompañada por la infanta Margarita y el duque de Soria.La fundadora presidenta, Paloma O'Shea, no se olvidó de citar la presencia del joven Isaac Albéniz en La Granja durante el estío de 1877 para encontrarse con el conde de Morphy, que fue su valedor cerca de la familia real y le facilitó su viaje de estudio a Bruselas. Dio cuenta ceñida de lo que ha sido el curso 94-95 el director de la Fundación Albéniz, Florentino Portero, y entregó la Reina los diplomas a los alumnos más destacados: violinistas, Iturriagagoitia, Martínez Mehner, David Mata y Manuel Camacho; viola, Manuel Ascanio; violonchelistas, Ana Colás y Asier Polo; cantante, María Luisa Martín Espada; contrabajistas, Alfonso Morán y Roberto Terrón, y pianista, Luis Miguel Borges.

En el escenario montado ante la cascada nueva y el templete, la orquesta de cámara del centro, con el catedrático José Luis García Asensio, ofreció un pequeño concierto en el que interpretó tres movimientos de la Serenata de Dvorak y el juvenil Concierto en re menor de Mendelssohn, escrito por su autor a los 13 años. Fue solista nada menos que Zakhar Bron (Uralsk, Kazajstán, 1947), que acaba de obtener un resonante triunfo con su concurso internacional de Novosibirk, en el que, como en todas las competiciones violinísticas, gran parte de los premios recayó en discípulos de Bron, que tocó su parte con auténtico magisterio.