El Tribunal de Cuentas detecta "deficiencias" en el Reina Sofía

El Tribunal de Cuentas detectó, en su informe fiscal de 1992 del Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, actualmente Museo Nacional, recuentos deficientes de los fondos artísticos, depósitos en, instituciones que han cambiado de nombre o ya no existen y "registros duplicados de obras, obras desaparecidas o en paradero desconocido, o situadas en instituciones distintas a las indicadas en los registros". También se señalan dudosos procedimientos de control en la venta de catálogos.

El informe se presenta hoy, lunes, en las Cortes. El tribunal está purgando ya los datos de 1994, y un equipo que analiza no sólo los ingresos y gastos, sino también la eficacia con la que se está actuando, sabrá si los directivos del museo se han encogido de hombros o no ante las irregularidades descubiertas.'En 1992, fecha en que se inauguró la exposición permanente del museo, se celebraron 17 muestras temporales. La directora en ese momento era María Corral. José Guirao, actual director, reconoció el viernes en Venecia "un cierto caos" notificado por el Tribunal de Cuentas, "pero no hay ninguna irregularidad", precisó. Añadió que ordenar la titularidad es difícil y laborioso dada la complicada procedencia de las colecciones.

El informe recoge también fallos en la producción editorial del Reina Sofía en 1992: no existen registros contables de las existencias en los almacenes y el control extracontable se realiza a través de fichas de almacén, sin inventarios físicos periódicos para contrastar las existencias reales con las que figuran en las fichas de movimientos. Tampoco existe un registro independiente con el coste de cada catálogo o cartel, "siendo el precio de venta al público el único que figura, y no siempre, en las correspondientes fichas de almacén". En este sentido, el tribunal recomienda una valoración adecuada de la producción editorial del organismo referente al registro de su importe y movimientos en la contabilidad y los estados financieros.

Respecto a los registros de obras, el informe señala que, en especial el relativo a la colección estable, "presentan importantes deficiencias". De la comparación entre la base de datos y los registros manuales se pone de manifiesto que en 1992 existían 282 obras incluidas en la base de datos y no registradas en los registros manuales, 679 incluidas en los registros manuales y no en la base de datos, 194 apuntes en el registro manual "que han sido objeto de modificaciones, fundamentalmente tachados autor y obra, sustituidos por otros que son los que figuran en la base de datos, sin que sobre dichas modificaciones se haya aportado documentación que las justifique".

El texto del Tribunal de Cuentas también explica que en la base de datos, en muchos casos, "no se incluye información sobre técnica, soporte y dimensiones de la obra y forma y fecha de adquisición. En la mayoría de los casos los registros correspondientes a grabados no incluyen su número de serie. Sólo se incluye la ubicación exacta de las obras relativas a pinturas".