¿Beca o premio?

En este país, pese a su Gobierno socialista, ningún estudiante puede cobrar su beca cuando la necesita, es -decir, al comenzar el curso. Este año, el servicio de becas de la Universidad de Santiago, en la que estudio, ha publicado con cuentagotas las listas de becas concedidas. Mi desgracia ha querido que me hayan metido en la quinta, (y última) lista de becarios, lo cual significa que es muy probable que se acabe el curso antes de que cobre.La beca que me corresponde debido a mi expediente académico y a los recursos económicos de mi familia es de 544.000 pesetas. Cada mes que el Estado se retrasa en el pago de mi beca, yo podría estar ganando dinero si lo hubiese invertido en una entidad bancaria, pero la realidad es muy distinta y lo que realmente sucede es que soy yo el que tiene que pagar mensualmente a la entidad bancaria que me concedió el crédito que me permite estar viviendo en la ciudad en que realizo mis estudios.

Creo que si se concede una beca para un curso académico, lo natural es que se pague al inicio del mismo, por lo que me resulta totalmente indignante la actual situación de desfase en el pago que, para colmo, se retrasa cada año un poco más.

Creo que es obvio el resultado de esta política. Las familias que vivan desahogadamente pueden mantener a sus estudiantes, que" una vez terminado el curso, recibirán la beca como una especie de premio, puesto que ya no la necesitan. Otros, en cambio, tendrán que subsistir como puedan, y los que tengan la suerte de poder pedir un crédito verán cómo la banca se lleva un buen mordisco de su ayuda al estudio.-