El Congreso puede aprobar la ampliación de la ley del aborto aunque la vete el Senado

El Congreso de los Diputados tiene la última palabra en la actividad legislativa y puede, por tanto, aprobar definitivamente cualquier proyecto de ley, sea cual sea la actitud del Senado . Eso ocurriría con la ley de ampliación del aborto, en el supuesto de que PP, CiU y PNV vetasen el proyecto en el Senado si PSOE e IU mantienen la mayoría absoluta en el Congreso para llevar adelante el proyecto. Otra cosa distinta son las consecuencias políticas que podría acarrearle al Gobierno una actitud beligerante frente a su socio parlamentario de Convergència i Unió. CiU y PNV han hecho saber su disposición para vetar, junto con el PP, el proyecto de ley de ampliación del aborto que pudiera aprobar el Congreso. Ese veto, que es como se denomina técnicamente al rechazo por parte de la Cámara Alta de un proyecto de ley, está previsto en el reglamento del Congreso y supone, simplemente, una demora ya que, vuelto el proyecto al Congreso, éste lo aprueba exactamente igual que si aprobase enmiendas introducidas en la Cámara Alta.Joan Rigol, vicepresidente primero del Senado (CiU) y Ricardo Sanz, portavoz del PNV en la Cámara Alta, declararon ayer a Efe que sus respectivos grupos están dispuestos a ejercitar el veto a la ampliación, del aborto si el proyecto llega a la Cámara Alta. Rigol explicó que Unió Democrática de Catalunya, formación coaligada con Convergència Democrática de Catalunya en CiU y a la que Rigol pertenece, mantiene un desacuerdo "tan profundo" con el proyecto de ley del aborto que supondría la revisión de la estrategia política de apoyos al Gobierno. El senador catalán añadió que Convergència dará libertad de voto a sus senadores, pero varios parlamentarios de este partido le han anunciado su postura contraria al proyecto. Ricardo Sanz, portavoz del PNV en el Senado, declaró a Efe que su grupo será "absolutamente beligerante" con este proyecto y votarán a favor del posible veto a la ley.

Respecto a la actitud de los diputados socialistas, Joaquín Almunia, portavoz del grupo, declaró ayer a Europa Press que su postura es contraria a dar libertad de voto en este asunto. El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, admitió la posibilidad del voto en conciencia, en una entrevista en la Cadena SER el lunes. La semana pasada Francisco Vázquez, alcalde socialista de La Coruña, anunció que no votaría la ampliación del aborto dada su condición de católico practicante.