Bolivia existe de muchas maneras
Un lector escribió desde Torrejón de Ardoz un artículo despectivo sobre Bolivia, publicado en Cartas al director del 23 de mayo. El articulista parece bien informado sobre los nombres de los dirigentes sindicales, pero tergiversa la realidad cuando afirma que un mes antes de la promulgación del estado de sitio los dirigentes del magisterio se hallaban encarcelados. La verdad entera es que aquellos dirigentes no están, ni han estado, presos por su actividad sindical. Están detenidos, pues son ciudadanos acusados de cometer un delito penal, es decir, se encuentran en manos de la justicia ordinaria por atentados a la propiedad privada.Luego afirma el articulista que Bolivia no existe, porque la prensa no publica los sacrificios y desventuras de sus trabajadores. Sin duda, Bolivia es mucho más que un estado de sitio o que su situación sindical. Es la primera reforma agraria en Suramérica, es modelo de estabilidad política, democracia y cambio; es un Estado que, sin traumas, reconoce y protege su plurinacionalidad.
El Gobierno del presidente Sánchez de Lozada lleva adelante un ambicioso programa de reforma educativa bilingüe; de transformación y universalización de la seguridad social; de fortalecimiento del sistema municipal y redistribución del ingreso, mediante la Ley de Participación Popular, y de crecimiento de la economía a través de la capitalización y privatización de las empresas públicas, hoy deficitarias.
Bolivia es también un pueblo que participa en la construcción de su destino a través de los partidos políticos, organizaciones sindicales y empresariales; elige el primer indígena en la vicepresidencia de un país americano y asume responsabilidades comunitarias en salud, educación, ecología y lucha contra el narcotráfico, origen hoy de grandes tensiones en el país,
En suma, a pesar de algún discurso de pretensión progresista, que juzga con prepotencia en la distancia, Bolivia es un país que avanza y existe de muchas maneras, que asume con dignidad su realidad y defiende sus valores originales, pero que se niega a responder al estereotipo exótico con que alguna tinta cómoda está dispuesta a dibujarle. Invitamos al respeto para un país cuyo pueblo con sacrificio y seriedad busca mejorar su presente.-
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