Un vendedor de 'La Farola' y otro de pañuelos se enfrentan por una esquina
Pugnaron por una esquina y un semáforo. Un vendedor de pañuelos de papel y otro de la revista La Farola, un periódico mensual, se desafiaron la tarde del viernes por un lugar donde ejercer la venta callejera. Un próspero rincón situado frente al centro comercial Arturo Soria, en la calle de Gregorio Benítez, donde sólo había espacio para uno. Ambos desenvainaron un punzón y un puñal. Al final, el comerciante de papel impreso, Carlos P. A., de 37 años, acabó en el hospital, y su rival, en la comisaría.
Ayer tarde la esquina estaba vacía. Nadie se atrevía a ocupar el escenario de la reyerta. Según los vigilantes jurados del Centro Comercial Arturo Soria, la pelea ocurrió sobre las cinco de la tarde. Uno de los guardas de Prosegur acudió veloz al punto de la pelea avisado por unos transeúntes. Cuando llegó el vendedor de pañuelos de papel huía. El indigente Carlos P. A., de 37 años, aferrado a un puñado de revistas de La Farola, tenía dos heridas en el costado. "No habló nada", cuenta el vigilante. "Tampoco se quejaba. Le traslade hasta la Clínica de Nuestra Señora de America y allí le deje". En este. centro médico fue atendido de dos heridas y trasladado después al hospital Ramón y Caja.Según los guardias, las peleas por conquistar la esquina del centro comercial son frecuentes. "Se han pegado varias veces, pero hasta ahora nunca se había derramado sangre", agrega el empleado de una de las tiendas.
A unos 100 metros del lugar de la riña, otro vendedor de pañuelos asegura que sabe lo que ocurrió. No se quiere identificar. Mientras pasea entre los coches relata que El Moreno lleva dos años en la esquina. "El de la revista llegó hace unos días", dice. "El Moreno le dijo que ese lugar era suyo. Pero no se iba. Hace unos días, como no se iba, comentó que al menos no apareciera por la zona hasta la siete de la tarde. No hizo caso. El de las revistas seguía por aquí y vendía montón de hojas, y El Moreno se cabreó", agrega.
Navaja roja.
El pasado viernes sobrevino el desenlace de una tensa relación. "Se que se pegaron. El Moreno le dijo que se fuera. Y el de la revista sacó una navaja reja", relata el vendedor de papeles. "Entonces El Moreno le pinchó con un pequeño punzon, pero no le hizo nada. Se que se le han llevado. Llamaré a la comisaría para ver que pasa", agrega.Este vendedor de papeles de papel confiesa que cualquier esquina de la calle Arturo Soria es un filón: "Puedo sacarme dos o tres talegos (un talego equivale a mil pesetas) pero estoy muchas horas de pie". "Por cada paquete pido 20 napos (100 pesetas), añade.
Los comerciantes ambulantes de La Farola venden cada ejemplar por 200 pesetas, de las que 150 son para el vendedor y el resto se dedican a gastos de edición. En la actualidad 200 indigentes ofrecen la revista mensual en diferentes puntos de Madrid. La mayor parte de los vendedores son indigentes e inmigrantes. También hay parados. La revista tiene una tirada de 20.000 ejemplares en Madrid. Según sus promotores en diciembre se vendieron 19.000.
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