El fiscal acusa a los tres piratas aereos argelinos de "delito contra la humanidad"

"Fue un delito contra la humanidad, una amenaza evidente de muerte castastrófica". Con este criterio, el fiscal jefe de la Audiencia de Palma de Mallorca, Antonio de Vicente Tutor, solicitó ayer la máxima pena prevista, 23 años de cárcel, para cada uno de los tres argelinos que en noviembre de 1994 secuestraron un avión en Argel, lo desviaron a Mallorca y retuvieron a sus 32 pasajeros y tripulantes ocho horas en el aeropuerto de Son Sant Joan.El Estado reclama más de cuatro millones de indemnización por los gastos ocasionados por el incidente. La compañía Air Argelie pide 600.000 pesetas por gastos de hotel de los pasajeros secuestrados. La abogada de los acusados, María Sansó, solicitó la libre absolución por estado de necesidad y "miedo insuperable".