Rechazada una oferta de TF1 para comprar Tele 5

El grupo Fininvest de Silvio Berlusconi y el alemán de Leo Kirch, que controlan Tele 5, rechazaron la semana pasada -por segunda vez- una oferta de la televisión francesa TF1 para hacerse con el control de la cadena española. La oferta incluía la posibilidad de revender un porcentaje importante al grupo español Correo -editor de una cadena de periódicos regionales-, pero se mantuvo muy por debajo de las evaluaciones económicas que habían hecho los ejecutivos de Berlusconi y Kirch.Fuentes de Fininvest explicaron que TF1 -vinculada al grupo constructor Bouygues- ofreció 45.000 millones de pesetas, una cifra inferior a los 52.000 millones ofertados por el grupo mexicano Televisa a finales del año pasado. El director de Tele 5, Maurizio Carlotti, cifra en 60.000 millones de pesetas el valor de la empresa en su conjunto.

Carlotti confirmó a EL PAÍS las negociaciones mantenidas y añadió: "Es impensable que podamos estudiar una oferta inferior a la de los mexicanos, después del éxito de las medidas de saneamiento".

Si Berlusconi no adopta ninguna decisión de venta parcial o total de sus intereses televisivos en Italia, que pudieran afectar a su participación en la cadena española, el plan para Tele 5 consiste en realizar una nueva ampliación de capital hasta un máximo de 20.000 millones de pesetas (El doble del que tenía).

Eso no supondrá mayor liquidez. El propósito de la ampliación consiste en saldar la casi totalidad de la deuda que la cadena mantiene con socios y proveedores, en concepto de derechos televisivos. En la práctica será una conversión parcial de deuda en capital social, una maniobra que los ejecutivos de Fininvest consideran esencial para terminar el saneamiento de la cadena.

La deuda por compra de derechos asciende en este momento a 27.000 millones de pesetas. Lo que resta de la deuda será abonado a los acreedores a medida que se vayan utilizando las películas y las series del almacén de derechos. Con este plan, las deudas quedarían saldadas en 1996.

De esta manera, los dos socios principales, Berlusconi y Kirch, pretenden crear las condiciones para que el ingreso de un socio español se concrete en una empresa con deudas financieras de un monto similar al de los créditos de sus clientes.

El objetivo apunta a que antes de finales de año haya tres socios, uno italiano, uno alemán y uno español, con una participación del 25% cada uno en Tele 5. Para el caso de que los accionistas minoritarios quisieran vender, se han producido contactos con el grupo norteamericano Time Warner, el japonés Sony y el mexicano Televisa.

Según Carlotti, el equilibrio de explotación conseguido en el primer trimestre del año se debe también a que Publiespaña -que gestiona toda la publicidad de Tele 5- factura más de lo previsto.