Hassan II entrega su sueldo a una colecta nacional contra la sequía en Marruecos

El rey Hassan II de Marruecos ha renunciado temporalmente a su salario, según anunció el propio monarca en un discurso radiotelevisado a la nación. Con este gesto el soberano encabeza una cuestación nacional con la que se intenta recaudar unos 200 millones de dólares (casi 25.000 millones de pesetas) para combatir los efectos perjudiciales ocasionados en la economía y especialmente en el campo por una implacable sequía.Todos los ciudadanos marroquíes, residentes en el país o en el extranjero, que quieran participar en esta cuestación podrán enviar sus donaciones a una cuenta corriente que a tal efecto se ha abierto en el Banco Central de Marruecos, recalcó el monarca en el mensaje, que duró cerca de 45 minutos y que fue emitido el martes en una de las horas de mayor audiencia, después del informativo de las ocho de la tarde.

Voluntaria

El soberano recalcó que la cuestación es sobre todo voluntaria y que está abierta. a cualquier tipo de donación por modesta que sea e incluso si supone únicamente la entrega de una jornada de salario. Con estas matizaciones, Hassan II lanzó un discreto mensaje a determinados sectores de la Administración, para evitar así las prácticas abusivas cometidas años atrás por algunos celosos funcionarios cuando se abrió una cuestación popular similar que permitió financiar la construcción de la gran mezquita de Casablanca, inaugurada hace cerca de dos años.

Los 25.000 millones de pesetas que se pretende recoger en esta cuestación, junto con otros 28.200 millones aportados por el Estado, gracias a una reducción de un 5% del presupuesto nacional, serán invertidos en el campo, el sector más directamente perjudicado por la sequía, según recalcó el monarca. Pero además de estas ayudas económicas Hassan II anunció otras medidas estructurales, entre las que se encuentra el refóorzamiento de determinados sectores de la producción, menos vulnerables a las cuestiones climáticas.

Por último, el rey anunció la inminente celebración de un referéndum para modificar el artículo 49 de la Constitución, lo que permitirá aprobar la ley de presupuestos a finales de mayo, cuando se conozca ya el resultado de las campañas agrícolas, y no en el mes de diciembre, fecha en que no se conocen aún los balances de lo sucedido durante el año en el campo.