PSOE y CiU acuerdan mejorar el tratamiento fiscal del 'leasing'

Socialistas y catalanes han alcanzado un acuerdo para la reforma del impuesto de sociedades que contempla mayores ventajas para las inversiones que se realicen mediante el sistema de arrendamiento financiero o leasing. El acuerdo abarca a todo el impuesto de sociedades, que aún no ha iniciado su tramitación parlamentaria, y establece nuevos incentivos fiscales para las empresas que facturan menos de 250 millones de pesetas. En cuanto al delito fiscal, el presidente del grupo parlamentario de CiU, Joaquim Molins, señaló ayer que fijar el límite en un porcentaje de la cuota "no es una cuestión de principio".El proyecto del impuesto de sociedades que envió el Gobierno a las Cortes el pasado mes de marzo, endurecía el tratamiento fiscal de las operaciones de arrendamiento financiero. El cambio introducido suponía. que los bienes comprados por este sistema (edificios, maquinaria, etcétera) se amortizaban igual que los demás activos y no durante el periodo de vigencia del contrato, como hasta entonces. Se establecía, sin embargo, un periodo transitorio para un sector que el pasado año movió más de medio billón de pesetas.

PSOE y CiU han acordado ahora introducir un nuevo capítulo en el impuesto de sociedades que permite amortizar estos bienes no como los demás, sino como si su valor fuera el doble de éstos. Las tablas de amortización son diferentes según el activo, de que se trate y las cantidades que resulten son deducibles fiscalmente.

El pacto entre el PSOE y CiU supone, pues, duplicar las deducciones para el leasing respecto de las que se aplicarán por el sistema normal de adquisición de activos.