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La OLP pide ayuda a la ONU contra la expropiación de tierras en Jerusalén

Faisal al Huseini, jefe de la delegación palestina en el proceso de paz, tocaba ayer desesperada mente a las puertas de la conciencia intemacional para tratar de impedir un nuevo atropello del Estado israelí. Huseini intentó conseguir la celebración de una reunión urgente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para adoptar una resolución que obligue al Gobierno israelí a "frenar y cancelar inmediatamente" su decisión de confiscar 53 hectáreas de tierra palestina en Jerusalén este.Mientras, en la antigua calle principal de Beit Safafa, el suburbio de Jerusalén árabe que pronto caerá atrapado en el mapa oficial de Israel, un avejentado transportista palestino llamado Jaled Abdel Salaim no parecía alarmado. "Hagan lo que hagan los judíos, algún día Jerusalén será exclusivamente árabe y con las puertas abiertas a todos los musulmanes del mundo", afirmaba.,

. En la más reciente batalla de la ciudad santa de Jerusalén, conquistada y destruida 18 veces a lo largo de su turbulenta y controvertida historia, las palabras de Abdel Salam reflejan la convicción, desesperada de muchos palestinos de que los tiempos actuales no van a durar mucho. Quizás Porque están aferrados a esa creencia, los habitantes de Jerusalén no han movido físicamente un dedo ante la decisión del Gobierno de Isaac Rabin de expropiar 53 hectáreas de tierras árabes para construir más de 6.000 viviendas para judíos. En otros tiempos, la sola mención de expropiación habría causado una revuelta popular.

Como muchos palestinos desencantados con la política de concesiones del presidente de la Autoridad Nacional, Palestina, Yasir Arafat, Abdel Salam prefiere remitirse a las expresiones de decepción popular como la pintada de la. puerta de la mezquita de Beit Safafa: "Arafat y sus acuerdos son una puñalada en la espalda de Palestina".

La condena a muerte, dictada ayer en Gaza por la justicia militar palestina, contra un policía palestino, amenaza con dividir aún más a este pueblo, al que el proceso de paz y el integrismo islámico han puesto en el vértice de una contienda civil. Saer Mohamad. Fares, miembro del servicio de Seguridad Nacional, fue encontrado culpable por tres jueces militares de haber matado a otro policía palestino para quitarle el arma. El condenado tiene 14 días para apelar la sentencia.

Pocos son los palestinos que tienen fe en los esfuerzos diplomáticos, de Arafat para bloquear la expropiación de tierras árabes en Jerusalén. No por ello, Faisal al Huseini deja de desgañitarse en Nueva York en su afán por extraer una resolución del Consejo de Seguridad que condene la confiscación de las tierras, una medida calificada por los palestinos como una flagrante violación de los acuerdos de Oslo que pone en peligro el futuro del proyecto de paz con Israel.

La decisión de Rabin llega en un momento en que el tambaleante proceso de paz con el mundo árabe necesitaba todo menos una expropiación de tierras palestinas. Una de las cosas que más resentimiento está provocando entre los palestinos es el hecho de que mientras el Gobierno-de Israel se embarcaba en su más agresivo proyecto de expansión, Rabin era huésped de honor del rey Hussein de Jordania, oficialmente el tutor y guardián árabe de la Ciudad Santa.

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Él domingo pasado, Rabin asumió responsabilidad personal de la confiscación de tierras árabes alegando la necesidad de viviendas de la población judía de Jerusalén, técnicamente la capital del futuro estado de Palestina pero que Israel defiende como su capital eterna, única e indivisible.

Jerusalén, incluyendo el sector oriental capturado por Israel en la guerra de 1967, es a todas luces el tema mas explosivo en la agenda de paz de la región. La expansión de la población judía es vista con alarma entre los palestinos, que forman hoy la minoría. "Continuaremos poblando Jerusalén de judíos a fin de fortalecerla en todos sus flancos", declaró Rabin.

Argumentos como pretexto

Los argumentos del Gobierno israelí que invocan motivos de expansión demográfica son tomados como un pretexto. Jalil Tufakji, el miembro de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) encargado de estudiar los efectos de la política israelí en ese sentido, ve razones mas fuertes: "Jerusalén oriental está siendo judaizado. Cuando llegue la hora de discutir el status de Jerusalén, los sionistas proclamarán que la ciudad es predominantemente judía. Su argumento se basará entonces en la política que han instituido desde hace décadas". Rabin puede toparse con objeciones norteamericanas durante su actual visita a Washington. Pero nadie en Israel cree que las posibles presiones van a surtir efecto.

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