La Comisión Europea acusa formalmente a Canadá de esquilmar los caladeros

El alguacil, alguacilado. La Comisión Europea lanzó ayer un durísimo ataque al discurso conservacionista que enarbola Canadá. Emma Bonino, responsable de Pesca, hizo público un documentado alegato probatorio de que Canadá es "la principal culpable" de la depredación de distintas especies. Bonino llamó a Canadá a "negociar de buena fe", mientras proseguían las conversaciones técnicas entre ambas partes en Bruselas. El Gobierno de Ottawa, mientras, prohibió ayer a la empresa canadiense Malik que suministre gasóleo a los pesqueros españoles, informa Primitivo Carbajo.Ayer, el primer ministro canadiense, Jean Chrétien, dijo ante el Parlamento de Ottawa que pensaba "continuar [su política], hasta que nos aseguremos de que la conservación de las reservas piscícolas estará garantizada para las generaciones venideras". El acusador se convertía en acusado. La comisaria Emma Bonino hizo público un amplio y detallado documento en el que se imputa a Canadá la principal responsabilidad de las fechorías ecológicas:

-Sobreexplotación de caladeros. Las propias autoridades canadienses han criticado a su país por su sobreexplotación de los caladeros y su pobre gestión de las existencias. Un 9jemplo es el Informe del grupo de trabajo sobre Ingresos y Ajustes en las Pesquerías Atlánticas, de noviembre de 1993. Este documento, conocido como Informe Cashin, acusa a Ottawa de "prácticas pesqueras destructivas", como desechar y tirar los alevines de especies no perseguidas, de "fracaso" al controlar la expansión del sector pesquero y minimizar los daños producidos por las nuevas tecnologías; y de exceso de optimismo en el cálculo de las reservas (TAC).

-Depredación del salmón del Pacífico. Esta pesquería está "cercana al colapso", según el Consejo del Salmón del Río Fraser, dependiente del Ministerio de Pesca y Océanos canadiense. Ese consejo, en su informe de 1995, atribuye el desastre a que "Canadá tomó la decisión política de estimular una estrategia pesquera agresiva".

-Esquilmación del pez espada. Entre 1988 y 1993 "Canadá aumentó las capturas de pez espada", mientras sus competidores las reducían, de acuerdo con los consejos de los científicos.

-Depredación del bacalao y el fletán. La flota canadiense es "la principal culpable de la depredación" de los peces planos. Las reservas de bacalao estaban en su 80% en aguas canadienses. Y el fletán ha sido diezmado "en las aguas poco profundas", donde sólo los ribereños pescan. Los desastres "sólo han ocurrido desde 1977, cuando Canadá extendió de hecho su jurisdicción" hasta las 200 millas y expulsó al resto "para construir su propia industria pesquera". Estas depredaciones están documentadas por la NAFO.

-Escapatorias. Canadá se ha autootorgado opt outs, escapatorias para que su flota soslaye las moratorias, teóricamente en concepto de "pesca recreativa y científica". Unas 20.000 toneladas de bacalao han sido pescadas por sus pescadores recreativos

-No firmó el acuerdo, Ottawa, "pese a una larga lista de declaraciones y promesas" ha rechazado la firma del acuerdo de 1993 -ratificado por la UE- que regula las disputas pesqueras, fortalece el proteccionismo y da acceso mutuo a los puertos.

El alegato de Bonino se completa con una contestación detallada a las acusaciones contra la flota europea lanzadas por Canadá. Desmiente que la UE haya aumentado este año la flota en la zona en un 15% sobre 1994: "España ha reducido su presencia de 30 a 17 barcos".

Niega que la UE se desentienda del conservacionismo. Al contrario, Bruselas ha aumentado los equipos de inspección y control, y los barcos europeos fueron "sometidos a 430 controles el pasado año" en esa región -la mayor parte, pues, de las 630 inspecciones-, frecuentemente a cargo de inspectores canadienses. Las infracciones ascendieron a un 13%.

El alegato de la Comisión culmina con la defensa del pesquero Estai. El capitán cortó las redes no para evitar el control de los inspectores canadienses, sino "para obtener mayor maniobrabilidad, porque estaba siendo atacado con disparo?. No es verdad que el navío ocultase un doble fondo, acusación que los inspectores comunitarios -de nacionalidad británica- reputaron falsa.

Soluciones diplomáticas

Esta defensa hace suyos también los argumentos españoles incluidos en la demanda presentada ante el Tribunal Internacional de Justicia, con sede en La Haya. Las previsiones indican que el plazo máximo para conocer la sentencia es de un año.

Varios representantes del Gobiemo español hicieron ayer declaraciones sobre la crisis pesquera hispanocanadiense. Javier Solana, ministro de Asuntos Exteriores, insistía desde Pekín en que la solución al conflicto "es diplomática y no militar", informa Ignacio Cembrero. Javier Gómez-Navarro explicó en el Congreso que una ruptura de relaciones diplomáticas con Canadá "no tendría gran incidencia en el comercio español". Luis Atienza, ministro de Agricultura y Pesca, se sumé a la idea de Solana y declaró que "la militarización no es la solución a este problema, sino la vía del diálogo".

[Por su parte, el líder del PP, José María Aznar, manifestó en Bruselas que la UE se juega su credibilidad en el conflicto con Canadá y pidió unidad frente a la "arbitrariedad o la fuerza", informa Efe. De todas formas, la corbeta Infanta Elena ya ha recibido órdenes de prepararse para salir hacia la zona de Terranova para proteger a los pesqueros españoles. UGT y CC OO han solicitado una reunión con Solana para que les informe de la marcha de las negociaciones].