Las películas de lesbianas abren un filón
Whoopi Goldberg, Glenn Close y Barbra Streisand participan en proyectos 'gay'
, El número uno de las taquillas norteamericanas es ahora The Brady Bunch, una película de enredos familiares basada en una popular serie de televisión de los años sesenta. En el guión televisivo se habían tachado las afecciones lesbianas de una estudiante hacia el personaje de Marcia, pero la directora de la película, Betty Thomas, ordenó reescribir esas secuencias que ha calificado como 'Interesantes'. Los ejecutivos de la Paramount se pusieron nerviosos y aceptaron sin quedarse tranquilos. La actual cosecha de producciones cinematográficas con asuntos de lesbianas ha contribuido a serenarlos.
Warner Bros no sólo ha producido Boys on the side con Whoopi Goldberg desplegando su tendencia homosexual en un papel de cantante. Incluso en los avances que anuncian el filme, la cuestión aparece como un acicate. De otra parte, Barbra Streisand y Glenn Close, productoras del telefilme Sirviendo en silencio: la historia de Margarethe Cammermeyer, han dado la cara respaldando su artículo ante la NBC, desazonada con los besos que Close y Judy Davis se dan en la boca. El telefilme, que cuenta la historia real de Cammermeyer, expulsada del Ejército tras confesar su homosexualidad, se difundirá en un horario de máxima audiencia.Los espectadores norteamericanos se encuentran más que al corriente del poder homosexual. Los homosexuales representan aproximadamente una décima parte de la población (poseen, entre otras, una publicación denominada así: Ten per Cent), pero su actividad les hace estar muy presentes. Comercialmente, tampoco les va nada mal.
El director holandés Paul Verhoeven, que ya trató con el lesbianismo en Instinto básico, rueda estos días en Las Vegas Show gir1s con aventuras lésbicas entre un grupo de bailarinas de top less. El año pasado, otra pelicula de lesbianas, Go fiah, dirigida por Rose Troche, llegó a recaudar, pese a su bajo presupuesto, más de 3.000 millones de pesetas en las taquillas.
Para el próximo 7 de abril está anunciado el estreno de Bar girls, sobre los amores entre ocho lesbianas que se congregan en un pub de Los Ángeles. Su productora y también guionista, Lauran Hoffman, ha declarado que no intenta de ninguna manera provocar, sino mostrar serenamente la felicidad que produce atender a los propios deseos.
"Hay que perder la vergüenza sexual", dice la feminista Camille Paglia a sus lectores. No more nice gir1s es el título del libro posfeminista de Ellen Willis, en la línea de Camille Paglia o de Katie Roiphe, convertidas en líderes gracias al giro estimulante que han introducido en las reivindicaciones. Para cualquiera de las tres, no está de más que las acciones femeninas se dirijan contra la discriminación laboral o contra los abusos sexuales, pero ¿por qué no pasar de la defensiva al ataque? En concreto, ¿por qué no reivindicar el derecho a la iniciativa sexual sin el temor al qué dirán? Con hombre o sin hombre.
Desde el armario
Las feministas, las adolescentes embarazadas y sin casar, las lesbianas, son una amenaza social, según el pensamiento conservador. Pero Gingrich, las múltiples asociaciones pías y el actual movimiento republicano son una cosa. Hollywood es otra. Entre las candidaturas para. el Oscar a la mejor película se encuentra Pulp fiction, con una escena en la que Rossane Arquete mira con ganas los pechos batidos y recién desnudos de Uma Thurman, la novia del traficante. Pero, además, propuesto para otro Oscar se encuentra el guión de Criaturas celestiales (Heavenly creatures), donde se describen las peripecias de dos niñas que gozan una relación homosexual desde el colegio interno hasta la vida adulta. The incredibly true adventures of two girls in love, basada en experiencias personales de su directora, Maria Maggenti, que se estrenará el próximo julio, sigue un camino parecido. "Mi esperanza es seducir al público más allá de sus propios prejuicios", dice Maggenti.
Efectivamente, podría hablarse de una cosecha norteamericana en sentido amplio. En el reciente Festival de Berlín, la canadiense Patricia Rozema ha exhibido When night is falling con una culminante escena erótica que interpretan dos mujeres bajo la carpa de un circo.
"Las lesbianas están saliendo del armario", ha titulado el diario USA Today. ¿Quita esto el sueño o provoca dolores de cabeza a los enardecidos republicanos que pregonan la regeneración moral del país? La marca Tylenol ha lanzado un nuevo producto llamado Tylenol PM que sirve a la vez como analgésico y como inductor del sueño. El anuncio para la televisión corre a cargo de dos simpáticas amigas que se conducen como lesbianas.
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