Detenido el hermano del jefe del 'cartel de Cali' cuando iba a la pitonisa
La noche del jueves, los astros no estaban de parte de Jorge Eliecer Rodríguez Orejuela, el segundo del clan de hermanos que controla el cartel de Cali. Fue detenido en un operativo del Comando Especial Conjunto (CEC) cuando se dirigía a la casa de su pitonisa de cabecera, María Marlén Ballesteros. Como tantas otras noches, Chéchere, apodo con el que se le conoce en los círculos mafiosos, fue al barrio de Junín, al sur de Cali, a cumplir un ritual: la lectura de la baraja española para descifrar su futuro.
Pero el hombre, de 52 años, al que se le atribuye una función decisiva en la exportación de cocaína dentro de la estructura del cartel que, según la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA), abastece el 80% de la demanda estadounidense, no alcanzó a que su hechicera le adivinara que 3.000 policías y soldados le venían siguiendo desde noviembre. A las 19.30 horas le rodearon para detenerlo y esgrimirlo como su mejor trofeo internacional en la dura lucha contra el narcotráfico.Cuando fue detenido viajaba solo, desarmado, en un automóvil Chevrolet último modelo, y era escoltado por cuatro hombres que conducían un Toyota y tampoco portaban revólveres ni metralletas, lo que indica que tal vez habían sido alertados de que les seguían los pasos o, simplemente, preferían pasar inadvertidos esa noche en la que Cali estaba militarizada y se realizaban controles sorpresivos.
Era el primer día de funciones del coronel Misael Murcia, nuevo comandante del CEC, contingente de élite que le ha costado al Gobiemo del presidente Erneste, Samper 16 millones de dólares (unos 2.000 millones de pesetas) en los seis meses que lleva constituido, sin que se hubiera producido la captura de ningún pez gordo.
El subdirector de la Policía, general Luis Enrique Montenegro, había viajado para supervisar el estreno de su subalterno en el frente más caliente, como primer paso de una operación nacional que ayer mismo se desplazó a tres departamentos de la zona cafetera, y en la próxima semana se desarrollará en otros siete departamentos de la norteña costa Caribe.
Uno de los siete grandes
"De las 200 principales cabezas del narcotráfico en el Valle del Cauca[departamento cuya capital es Cali] y en Colombia existen siete personas que tienen la mayor preeminencia y una de esas siete es precisamente la que fue capturada... Se trata de un golpe contundente, trascendental, importante", afirmó ayer el ministro de Defensa, Fernando Botero, en la sede de la Policía Judicial de Bogotá, a uno de cuyos calabozos fue trasladado desde Cali Rodríguez Orejuela.
Los otros jefes de la cúpula del cartel son Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, los más conocidos y en quienes hasta ahora se había centrado la atención de la opinión; José Santacruz, Francisco Herrera, y Víctor Patiño; el séptimo miembro no fue identificado por el ministro.
Hace ocho meses, la fiscalía dictó orden de captura contra Rodriguez Orejuela por tráfico de drogas y posesión ilegal de armas y de documentos falsos. Sobre él también pesa un proceso por narcotráfico en un tribunal de Manhattan (Estados Unidos) por una supuesta negociación con agentes encubiertos de la DEA para enviar 457 kilos de cocaína de Panamá a Nueva York en 1990.
Las autoridades insistieron en despejar las suspicacias que suscitó la detención, aparentemente como resultado de la presión ejercida por Estados Unidos contra el Gobierno del presidente Samper, a quien critica su indulgencia en la lucha contra los carteles de la droga.
