Los 145.000 nuevos empleos en el sector privado en 1994 ratifican la recuperación

El aumento de la ocupación en 46.570 personas durante el pasado ano, según los datos de la última encuesta de población activa (EPA), no da una idea exacta del impulso de la recuperación económica. Resulta mucho más relevante el crecimiento del sector privado, que registra un aumento de 145.000 asalariados a lo largo del pasado año, según los datos de la misma EPA. Todos los analistas consultados consideran muy positivo que la recuperación económica se apoye exclusivamente en el aumento de empleo por parte de las empresas privadas.Durante la anterior fase de crecimiento, 1986-1991, el sector público contribuyó en buena parte a la creación de empleo con unos 300.000 nuevos puestos de trabajo. Ahora el. empleo privado refleja más fielmente la evolución de la economía. El sector privado compensa además el encogimiento del público, que perdió 144.000 puestos desde mediados de 1992. Ello significaría también que la recuperación real de las empresas es más intensa de lo previsto.

El menor crecimiento de los ocupados en general en 1994 es consecuencia de la caída del empleo público en 60.000 personas y la reducción del número de empleados que trabajan en empresas de su familia, que ha caído en 51.400 personas. En el mismo periodo -cuarto trimestre de 1994 respecto al de 1993- los empresarios con o sin asalariados aumentaron en 11.000 personas y los miembros de las cooperativas disminuyeron en 5.000.

Según Marcos Peña, secretario general de Empleo, el crecimiento de los trabajadores en el. sector privado "revela que en definitiva el empleo no lo crean el BOE ni el Gobierno, sino las empresas, que es lo normal". Peña Considera que el comportamiento del empleo se está normalizando y cada vez se ajusta más a la evolución de la economía. En su opinión, eso es consecuencia de la modemizacion del mercado de trabajo y de la reforma laboral.

"Es lo mejor"

El aumento de los asalariados del sector privado en 145.000 personas en 1994 supone un crecimiento del 2,2%, casi la mitad de los incrementos registrados entre 1987 y 1990, los años de mayor crecimiento del empleo. Sorprende que el aumento de los asalariados privados 'coincida casi con la reducción del paro registrado, que en 1994 fue de 149.013 personas, según el Inem. A pesar de las diferencias en términos absolutos entre la EPA -que cifra el número de parados en 3.698.000- y el Inem -que estima en 2.556.829 el número de demandantes de empleo en sus oficinas-, los expertos reconocen que ambas estadísticas reflejan bastante acertadamente la tendencia.

Según José Juan Ruiz, director del departamento de Estudios de Argentaria "que la creación de empleo se produzca en el sector privado es lo mejor que puede ocurrir". Ruiz considera "muy positivos los datos de la EPA". "Por primera vez en los últimos tres años se produce un incremento en la construcción, industria y servicios a la vez", añade. Pero en su opinión también aparece un dato inquietante: "La tasa de actividad, que venía creciendo a un ritmo del 1,5%, ha caído al 0,5%". Esta tasa mide la proporción de activos -personas que trabajan o quieren trabajar- en relación con la población de 16 a 65 años. Su caída significa un descenso del interés de los inactivos por buscar empleo. Es decir, no cala la creencia de que hay más oportunidades de empleo.

La importancia del aumento del empleo en el sector privado es -también destacada por Esteve, Sanromá, director del servicio de Análisis de la Cámara de Comercio de Barcelona. Sanromá considera que "la evolución de los asalariados es mucho más representativa que la de los ocupados para medir el ciclo económico".