Oleksy duda de poder formar en Polonia un Gobierno aceptable para Walesa

Jozef Oleksy, candidato a primer ministro polaco, apoyado por los ex comunistas y el Partido Campesino, se mostró ayer escéptico en cuanto a la posibilidad de formar un Gabinete aceptable para el presidente Lech Walesa. El jefe del Estado polaco afirmó que no estaba dispuesto a conversar con el candidato a primer ministro hasta que éste no sea designado oficialmente por el Parlamento.Para hoy está prevista la votación en la Cámara de la moción de censura constructiva por la que cesará el primer ministro Waldemar Pawlak, acosado por el presidente Lech Walesa y finalmente caído, y será designado Jozef Oleksy como nuevo primer ministro. Éste, sin embargo, todavía no había decidido ayer si formará Gobierno o no.

Oleksy lleva más de dos semanas intentando remodelar el Gabinete de Waldemar Pawlak, quien declaró su disposición a marcharse después de que el presidente polaco amenazara directamente al Parlamento con proceder a su disolución si no se cambiaba el Gobierno.

En su afán desestabilizador, Lech Walesa se sirvió de los conflictos internos en la coalición ex comunista gobernante, que ganó las elecciones legislativas en septiembre de 1993, y consiguió la destitución de Pawlak como primer ministro por los propios partidos de la alianza socialdemócrata-campesina.

Los observadores consideran cada vez más probable la autodisolución del Parlamento polaco si Oleksy fracasa en su misión. El candidato a primer ministro dejó ayer claro que no ve posibilidad de formar Gobierno "si no existe buena voluntad por parte del presidente Walesa". "Temo que la entrevista de hoy", declaró Oleksy, "no sea un síntoma de esta buena voluntad [por parte del presidente]".

Recibimiento gélido

Efectivamente, Lech Walesa recibió a Oleksy gélidamente. El encuentro duró apenas 15 minutos y el portavoz presidencial manifestó a los periodistas que no se había abordado el tema de la composición del nuevo Gabinete, aunque precisamente sobre este punto debían haber hablado los dos políticos. Oleksy tenía previsto presentar sus candidatos a los ministerios de Asuntos Exteriores, Defensa e Interior, entre otros.

Las dos primeras carteras son objeto de continua lucha entre Lech Walesa y la coalición gubernamental después de la dimisión del ministro de Defensa el otoño pasado y la del titular de Asuntos Exteriores hace dos meses. Walesa quiere a sus propios candidatos al frente de ambos ministerios, que continúan vacantes.

El jefe del Estado polaco ha manifestado recientemente sus pretensiones de controlar también los nombramientos en los ministerios responsables de la economía. La coalición gubernamental ha anunciado ya que no está dispuesta a transigir con unas exigencias que considera claramente inconstitucionales.