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La SER recibió ayer la orden judicial de "no calificar" a García

El periodista de la COPE lleva al juzgado la pugna entre programas deportivos

La cadena SER y el periodista José Ramón de la Morena recibieron ayer la notificación de un auto del Juzgado de Primera Instancia número 42 de Madrid, por el cual se les requiere para que dejen de emplear "cualesquiera expresiones que signifiquen calificación" del director de deportes de la COPE, José María García. La SER va a oponerse a esas medidas, "dictadas sin audiencia previa de parte", por entender que son desproporcionadas y "contrarias al derecho de libertad de expresión, amparado por la Constitución", según una nota distribuida por esta cadena.

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Mucho más que censura previa

El magistrado-juez Eduardo Delgado Hernández dictó el auto de medidas cautelares a petición de José María García. Este último ha demandado a José Ramón de la Morena, a quien atribuye haberle llamado "canalla" durante el programa deportivo El Larguero.

Esa demanda es la tercera que García presenta contra la SER o sus periodistas deportivos. La primera fue resuelta con la condena de José Ramón de la Morena a una indemnización; y la segunda, dirigida contra Alfonso Azuara -subdirector del programa de De la Morena-, se encuentra pendiente de sentencia.

José María García, que pide ahora el auxilio de la justicia para limitar la expresión de sus competidores, tiene numerosas sentencias que le afectan. Fue condenado a indemnizar con un millón de pesetas a Horacio de Leyva, presidente de los entrenadores de fútbol, al que García llamó paniaguado, manipulador, pelota, abrazafarolas y babayén -término que el propio García traducía como "figurón de vía estrecha"-. Reincidió en los ataques a Leyva y fue condenado de nuevo.

A las puertas de la cárcel

Los presidentes del Rayo Vallecano y de la Federación Española de Fútbol demandaron a García en 1988 por intromisión ilegítima en su honor. El periodista fue condenado a indemnizarles con un millón de pesetas a cada uno. García ha sido condenado también por insultar a Ramón Mendoza, aunque esa sentencia se encuentra recurrida.

En 1990, José María García se salvó de entrar en la cárcel gracias a un indulto del Gobierno. Había sido condenado a dos penas de arresto, una por llamar "payaso" al entonces ministro Pío Cabanillas, y otra por la forma de dar una información sobre José Luis Roca, en aquellos momentos presidente de la Federación Española de Fútbol.

José María García lleva muchos años haciendo de Políticos, deportistas y periodistas los blancos preferidos de sus dardos verbales. A Perico Delgado le ha definido como "el más tonto del pelotón"; de Jorge Valdano ha dicho que es un "fracasado, rapsoda, poeta, filósofo de vía estrecha", mientras el árbitro Pes Pérez era descrito como "el del trote cochinero". Ramón Mendoza ha recibido lo suyo: "Calzonazos, cantamañanas, necio, zafio, histérico, caballerete de pelo blanco y conciencia negra". Los epítetos dedicados a Jesús Gil tampoco desmerecen: "Orangután, gorilón, King Kong, patán descerebrado, impresentable". Al lado de esto, lo de menos es que a Javier Solana le llamara "Javierito tururú", y a Soledad Becerril, "la lacitos". García ataca a otros periodistas deportivos: "Jodido cojo engañabaldosas" es una forma de referirse a José Javier Santos, de Tele 5.

García, de 50 años, es la principal figura deportiva de la cadena COPE. Con él compite desde la SER José Ramón de la Morena, de 38. Éste último y su subdirector, Alfonso Azuara, salpican a veces su programa con alusiones tales como decir que en Madrid se está cambiando la instalación de gas ciudad porque el butano está caduco (Butano es el mote más conocido de García) o ironías sobre declaraciones anteriores de García. Un público juvenil les jalea las chanzas.

García ha tomado la iniciativa de judicializar lo que hasta ahora era una polémica en las ondas con De la Morena. Ambos se disputan la audiencia de la misma franja horaria, y en los dos últimos años, el programa dirigido por De la Morena se ha acercado mucho al de aquél.

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