España pierde un cargo en el Europarlamento

España ha perdido peso en el grupo de altos cargos del Parlamento Europeo. La Mesa de la institución acaba de aprobar la rescisión de contratos de cuatro altos cargos, dos de ellos españoles: uno con rango de director general (A1, en la jerga jerárquica) y otro con el rango de director (A2). A cambio, ha logrado el nombramiento de un director y el pacto verbal de que otro español se incorporará a esa categoría.Tras la aprobación de la rescisión de contratos a cuatro altos funcionarios, se ha nombrado, por promoción interna, a seis: un danés, un francés, dos alemanes, un belga y un holandés. Lo escandaloso del procedimiento es que la Mesa ha incumplido sus propias normas, acordadas el 27 de noviembre: idoneidad para el cargo, "equilibrio geográfico" y "necesidad de promover la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres".

El equilibrio geográfico se recompuso un poco cuando el vicepresidente José María Gil-Robles (PP) exigió que otro español fuera promocionado, lo que logró por votación en la persona de Ismael Olivares, al que también otorgaron su voto Josep Verde (PS) y Antoni Gutiérrez (Izquierda Unitaria). "El secretario general, Enrico Vinci, es contrario a los españoles y favorece a candidatos de los países fundadores", coincidieron en manifestar distintas fuentes parlamentarias. Lo de la igualdad hombre-mujer quedará para mejor ocasión, pues los siete nombrados son varones. Uno de los cuatro, contratos rescindidos es el de Carmen Gómez de Enterría, la única española con rango de directora general en las instituciones comunitarias. En cuanto al otro contrato, el de Joaquín Portillo, consideraron que el trabajo que se le asignó -oficinas en el extranjero- no era muy in teresante desde el punto de vista de la influencia española. Ambos rescisíonesfueron aprobadas por Gil-Robles y Verde, pero no por Gutiérrez.