Un párroco niega la primera comunión a dos niños por una deuda de sus padres
El párroco de la localidad de Pola de Allande, en el sur occidental de Asturias, ha negado la primera comunión a dos niños del pueblo hasta tanto sus padres no abonen una cuota de 17.000 pesetas por las obras de reparación realizadas en el templo parroquial. Los padres acusan también al sacerdote, José Manuel Vídal, de prohibir a sus hijos la asistencia a la catequesis. El padre de uno de los niños está en el paro.Según informó ayer el diario La Nueva España, de Oviedo, el párroco expulsó de la iglesia a los dos niños el pasado día 12 cuando ambos se disponían a participar en la catequesis con el fin de prepararse para recibir la primera comunión. Una de las madres, Valentina Menéndez, acudió a la iglesia y mantuvo una fuerte discusión con el sacerdote.
Las familias habían mostrado su disposición a colaborar con las obras realizadas en el templo, que han supuesto una inversión de siete millones de pesetas en los últimos 10 años, pero habían solicitado una demora por no poder afrontar en este momento el pago.
El sacerdote declaró al mencionado rotativo que los padres de los niños están en condiciones de pagar la deuda, pero que no quieren y reiteró su firme intención de mantenerse en la decisión adoptada. "Hay muchas familias que han aportado más de lo que les corresponde y otras se niegan a pagar. Es injusto y no voy a ceder". El cura agregó que las familias morosas no cumplen tampoco con las obligaciones religiosas, "un motivo más", dijo, "para que sus hijos no participen en la catequesis".
Isabel Vázquez, la madre de otro de los pequeños, afirmó ayer que el párroco amenaza constantemente con no prestar sus servicios religiosos a quienes no pagan la cuota y que mucha gente le tiene miedo.
