Argel avisó a Rabat de atentados integristas en Marruecos
Las autoridades argelinas hicieron llegar a los responsables del Ministerio del Interior marroquí una advertencia sobre la presencia en su territorio de militantes integristas radicales que trataban de efectuar operaciones armadas de desestabilización en Marruecos, y que culminaron con el atentado del hotel Atlas Asni de Marraquech, en el que perdieron la vida dos turistas españoles el pasado 24 de agosto.La existencia de esta advertencia fue, desvelada a este periódico por un alto funcionario de la Administración argelina pocos días antes de que se reanudara en la ciudad de Fez el juicio contra 18 miembros de un comando integrista acusados de intentar perpetrar las intencionadas operaciones de desestabilización.
Una advertencia similar había sido comunicada por las autoridades francesas a los responsables de la Administración de Rabat, según informó en su día el periódico El Wattan, de Argel.
La existencia de estas advertencias no han sido confirmadas oficialmente por las autoridades de Rabal, y no podrán tampoco ser verificadas en el juicio que actualmente- se celebra en la ciudad de Fez, ya que las únicas personas capaces ¿le atestiguarlo -los ministros del Interior de Argelia y de Marruecos- no serán convocadas al estrado ni se les tornará declaración, tal y como han solicitado los abogados defensores.
Los letrados encargados de la defensa de los autores materiales del atentado de Marraquech han presentado en las últimas horas ante el tribunal de Fez una solicitud pidiendo la comparecencia de los dos ministros.
Con estas comparecencias, los abogados trata de clarificar las acusaciones vertidas en su día por las autoridades marroquíes, quienes en un primer momento aseguraron que algunos servicios de seguridad de Argelia se encontraban detrás de los atentados. Dichas acusaciones no han quedado recogidas ni demostradas en el caso que se está juzgando en Fez, según han asegurado los abogados defensores que han tenido acceso al sumario.
Mientras, el proceso de Fez se encontraba hasta ayer bloqueado como consecuencia de una maniobra minuciosamente tramada por los defensores, que no cesan de plantear ante el tribunal recursos reclamando nuevas diligencias, nuevas pruebas o alegando defectos de forma en la instrucción del sumario, lo que obliga a los magistrados a paralizar las sesiones.
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