Karadzic insta a la ONU a acordar los detalles del alto el fuego en Bosnia

El jefe de los serbios de Bosnia, Radovan Karadzic, ha escrito a los mandos de la ONU en la antigua Yugoslavia para que le visiten en Pale y acordar los pormenores del alto en fuego en Bosnia, que debe comenzar a mediodía de este viernes, y abrir el camino a negociaciones sobre un cese general de hostilidades de cuatro meses. Karadzic dice en sus cartas a Yasushi Akashi y al general Michael Rose que el impulso hacia la paz creado por la gestión mediadora de Jimmy Carter no debe ser desaprovechado.

El cuartel general de Naciones Unidas en Zagreb, donde se respira un cierto optimismo, ha confirmado que Akashi viajará hoy a Sarajevo. Carter finalizó su misión de paz tras entrevistarse en Belgrado con el presidente serbio, Slobodan Milosevic, y ha regresado a Estados Unidos. Milosevic, que recibió ayer en la capital serbia a los representantes de los cinco países mediadores del Grupo de Contacto (EE UU, Rusia, Alemania, Reino Unido y Francia), dijo tras encontrarse con Carter que su misión "merece todo el apoyo de Serbia, que intentará contribuir plenamente a la paz".El ex presidente estadounidense, que ha mediado a instancia de los serbobosnios pero con apoyo diplomático internacional, dice estar convencido de que esta vez el armisticio será real. Musulmanes y serbios han acordado silenciar sus armas a mediodía del viernes e iniciar inmediatamente negociaciones para un cese de hostilidades en todo el territorio de Bosnia, negociaciones que deberían estar listas para el próximo 1 de enero.

El alto el fuego sería verificado por las fuerzas de la ONU, que tendrían que interponerse entre los dos bandos en guerra a lo largo de frentes que suman alrededor de 1.000 kilómetros. Las Naciones Unidas han pedido a los combatientes que refrenen sus acciones bélicas especialmente en Bihac, donde ayer resultaron heridas cuatro personas.

Reapertura del aeropuerto

Karadzic ha permitido la reapertura del aeropuerto de Sarajevo, que está operando desde ayer a plena capacidad para los vuelos humanitarios y se ha comprometido a dar vía librea todos los convoyes de la ONU. Permanecen, sin embargo, las dificultades para los cascos azules en el aprovisionamiento de combustible. Ayer, además, un convoy danés fue retenido en un puesto de control serbio cerca de Sarajevo, donde le fue requisado el material informático destinado a la ONU.Ambas -partes sérbios y musulmanes- se comprometen al alto el fuego en un documento de ocho puntos; pero hay una discrepancia sustancial ante el plan de paz de las potencias, aceptado hace meses por Sarajevo y rechazado por los serbios. Mientras el presidente bosnio lo considera la base de un acuerdo global, Karadzic lo ve sólo como un punto de partida.

En este plan, revisado recientemente por las potencias para permitir a los serbios una suerte de confederación con Serbia, se prevé el 51% de Bosnia para musulmanes y croatas y el resto para los serbios, que ahora controlan un 70%.

Por otra parte, ayer se abrió la autopista Zagreb-Belgrado, cerrada desde hace tres años.