La Universidad puede cambiar las notas del COU

La Universidad de Alicante tenía competencias para revisar las notas de los alumnos de COU del instituto de bachillerato de Sant Vicent del Raspeig, pero debió examinar el contenido de cada ejercicio y no limitarse a aprobar a aquellos que tenían luna única materia pendiente. Así lo establece una sentencia del Tribunal Superior valenciano que no admite por razones de forma el recurso presentado por el profesor que se sintió desautorizado, pero advierte que no existe "una obligación legal del profesor de a robar un cupo de alumnos".

José María Sánchez del Campo, profesor de Filosofía en el instituto de Sant Vicent, una localidad de 29 habitantes cercana a Alicante, es famoso por su dureza. En junio de 1992 suspendió a un elevado porcentaje de alumnos, que iba desde casi el 50% en algunos grupos hasta más del 70% en otros. 17 de los alumnos suspendidos recurrieron a la Universidad para conseguir el aprobado en Filosofía. La junta permanente de supervisión de COU de la mencionada Universidad, decidió a aprobar a 12 de ellos, aquellos que sólo tenían esa asignatura como suspendida.

Los 12 alumnos beneficiados por la medida pudieron presentarse a las pruebas de selectividad, que todos aprobaron. Sin embargo, el examen de Filosofía del selectivo fue suspendido por nueve de ellos. El profesor Sánchez del Campo se sintió desautorizado y recurrió a los tribunales de justicia.

La sentencia dictada ahora rechaza el recurso del profesor porque "carece de legitimidad" procesal, ya que "ninguno de sus derechos o intereses se ven afectados por la resolución recurrida". Y añade: "Utilizando un símil judicial: un juez de primera instancia no puede recurrir contra una sentencia de la Audiencia Provincial por muy injusta que le parezca".

Evaluación global

A pesar de no admitir el recurso, los magistrados efectúan una serie de comentarios sobre el fondo del asunto. La obligación o no de aprobar a un porcentaje concreto de alumnos, la capacidad de la Universidad para revisar los exámenes de los profesores de COU, y la evaluación global del alumno de COU y no su evaluación como una suma de notas en cada asignatura son debatidas a partir de la sentencia.El profesor Sánchez del Campo señala: "Produce sonrojo que miembros de una Universidad actuaran de forma semejante, modificando arbitrariamente unas calificaciones e incluso, en algunos casos, aprobando a quienes ni siquiera habían realizado los exámenes". Sánchez añade: "El señor Ruiz Beviá, presidente de la junta de supervisión del COU en junio de 1992, debería explicar qué indujo a la citada comisión a hacer dejación de las competencias que el Tribunal Superior le reconoce, si hubo trato o no de favor con relación a los alumnos que tan cómodamente aprobaron, o si se pretendió implantar el COU a la carta, pues sería interesante que todo el alumnado -no unos pocos privilegiados- pudieran, descartando no importa qué materia, disfrutar de tan ilegal situación".

En la Universidad de Alicante prefieren evitar la idea que un enfrentamiento personal con el profesor Sánchez del Campo. Fuentes universitarias recalcan que la sentencia da la razón a la Universidad al no estimar el recurso del profesor. Además, aseguran que la actuación de la comisión de supervisión del COU fue perfectamente legal. En su opinión, el COU es un curso diseñado para conocer la aptitud global de un alumno y no la suma de los conocimientos concretos de cada materia. En ese sentido, recuerdan la propia configuración del examen de selectividad, donde un estudiante puede suspender una o varias materias, pero obtener una calificación global de apto.

"No hubo desautorización"

Las mismas fuentes rechazan que aprobaran a los 12 alumnos utilizando como único criterio que no tenían otras asignaturas pendientes. "Revisamos los exámenes, aunque no lo reconozcan los magistrados del Tribunal Superior en su sentencia", señalaron.En opinión de la Universidad de Alicante, la comisión de supervisión no desautorizó al profesor Sánchez del Campo: "Nunca manifestamos que había suspendido bien o mal a los 12 alumnos, lo que hicimos fue evaluar si esos alumnos, globalmente, podían ser candidatos a participar en las pruebas de selectividad".

Los conflictos en el instituto de bachillerato Sant Vicent del Raspeig han continuado en cursos posteriores. Varios alumnos solicitaron la revisión de otros suspensos, pero la Universidad no volvió a modificar las notas de Filosofía.

A la vista de la revisión de notas en el instituto de Sant Vicent, alumnos de otros institutos alicantinos pidieron la revisión de sus notas. Tampoco tuvieron éxito.