_
_
_
_
Crítica:TEATRO
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

La doncella y el mal

Esta obra tiene casi treinta años. Tuvo el Premio Lope de Vega; como tantas otras, se escamoteó la cláusula que hacía obligatorio su estreno en el teatro Español, y la censura la prohibió. Fue una inesperada suerte para el escritor: se fue a Francia, se forzó en el otro idioma, y publica allí felizmente, con buen éxito, sus novelas. Aquí es casi desconocido. En 1991 estrenó Mrs. muerta Smith: tuvo, más que éxito, reconocimiento, y nuestra admiración. Después, Los gatos: lo mismo. Es un autor recuperado, querido. Nada, sin embargo, le va a compensar por sus años de exilio y por su escritura en lengua extranjera. Temo que esta tercera obra que estrena en España, no sea mejor que las anteriores. Se le nota el tiempo: el retrato de la, corte franquista en 1966 no tiene! vigencia en 1994, en que ya necesita pocas metáforas para ser descrito, y pocas claves de vanguardia para poder ser expresada en su decadencia y horror. Se nota también el tiempo pasado en la estructura, en su longitud, en su confianza en la fuerza del diálogo que termina por ser reiterativo, aunque haya que hacer expreso aquí el juicio de que su escritura en castellano es excelente, y su pensamiento claro. Pero tiene valores permanentes. Supongamos que el personaje principal, la doncella, llamada aquí Casandra, aunque a veces recuerda más a Juana de Arco, representa la Verdad, con mayúscula; tratan de reducirla al silencio cortándole la lengua; además, la envían al destierro. Puede representar también al Autor; y al Hombre, y Cristo y Dios, porque hay mucho de auto sacramental laico en esta obra. Y a la Esperanza. No importa la multitud de acepciones: en la mente del hombre, pueden ser una sola, y también el tiempo se percibe en la condición de obra abierta, en la que el espectador debe colaborar (no está hoy con muchas ganas). Este valor de libertad, verdad, etcétera, que es un efluvio permanente en la obra, no deja de ser válido en este momento de descalabro, en el que la Palabra se pierde, o se arrebata o sufre las violaciones continuas de la semántica. En ese aspecto simbólico, naturalmente, los personajes ya no son la corte de Franco; podrían ser otros distintos, pero su revestimiento y sus nombres no corresponden.Tiene también la permanencia de una belleza: la del lenguaje no es solamente de palabras o de sonoridad, sino de conceptos, de idealismos, de aforismos incluso. Con tanta facundia que llegan a cansar.

Queridos mios, es preciso contaros ciertas cosas

De Agustín Gómez Arcos,. Intérpretes. Walter Vidarte, Rosa Novell, Mónica Glaenzel, Manuel de Blas, Antonio Duque, Carlos Velasco, Gloria Muñoz, Eva García, Patricia Mendy, Alicia Hermida, Juan José Otegui, Iñaki Guevara, Pedro García de las Heras. Vestuario: Comejo. Escenografía: Pinto's. Dirección: Carme Portacelli. Teatro María Guerrero, 7 de noviembre de 1994.

Creo que sería interesante que la reivindicación de este autor, como la de otros malditos de la época ruda y brutal, no se hiciera en orden cronológico, con la voluntad y la tozudez de salvar las obras antiguas injustamente tratadas, sino que expusiera hoy su tea tro de hoy: seguramente lo escribe, al mismo tiempo que sus novelas. Alcanzaría seguramente una plenitud que su categoría literaria merece. La obra está depositada en varios personajes: naturalmente, en la joven Casandra, Mónica Glaenzel, de quien se desprende al mismo tiempo ingenuidad y dureza, coraza defensiva de su razón en el mundo. Manuel de Blas, en el Capitán converso que la acompaña en algunos momentos, expresa en términos más humanos lo que ella dice en los sublimes. El digamos propietario de esa figura, el Feriante que la exhibe y la vende, y da prólogo a la obra, es Walter Vidarte: con él, con Alicia Hermida, un reparto numeroso da la vida posible a la obra, en la que se ha esforzado la dirección de Cárme Portacelli, que conoce muy b¡en al autor. La obra tuvo aplausos de reconocimiento y de admiración para todos.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_