Los zapatistas romperán el alto el fuego si el PRI accede al Gobierno de Chiapas
El Ejército Zapatista habló. Después de varias semanas sumida en el mutismo, la guerrilla indígena alzada en armas el 1 de enero afirmó en la noche del martes que consideraría roto el alto el fuego si el gobernador electo en el Estado mexicano de Chiapas, Eduardo Robledo, toma posesión hoy de su cargo. El comunicado zapatista ha dinamitado los esfuerzos del nuevo presidente, Ernesto Zedillo, por lograr un acuerdo de última hora con la oposición para la formación de un nuevo Gobierno en Chiapas.
En un gesto desesperado, Robledo ganador oficial. de los comicios de agosto, señaló ayer que estaría dispuesto a renunciar si los zapatistas deponen las armas. El anuncio del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), que siempre ha sabido calcular muy bien los tempos, se produce horas antes de que Robledo se convierta en el nuevo gobernador y después de los denodados esfuerzos del nuevo Gabinete mexicano por lograr un cambio de poderes pacífico en un Estado que es ya como una olla a presión.El subcomandante Marcos, líder y portavoz de la guerrilla, convocó a la prensa en la selva Lacandona, y en medio del tradicional despliegue de encapuchados leyó tres comunicados desde un estrado. En el primero, los zapatistas consideran la llegada al Gobierno del Estado de Chiapas del "vergonzante priísta Eduardo Robledo" como "la ruptura del cese el fuego por parte del Gobierno federal". De esta forma, terminaría la etapa de resistencia civil pacífica chiapaneca y la guerrilla tendría entonces las manos libres de compromisos firmados el 12 de enero. Por primera vez, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional respalda de manera abierta y directa al candidato de la oposición, el periodista Amado Avendaño a quien consideran ganador de las elecciones e invitan a encabezar un "Gobierno popular en rebeldía".
Bienvenida a la "pesadilla"
En otra carta, Marcos da la bienvenida "a la pesadilla" al nuevo presidente mexicano, a quien echa por tierra con toda dureza la propuesta de negociación directa planteada en el discurso de investidura. "No le creemos" escribe el subcomandante a Zedillo, a quien recomienda "un paracaídas para ese barranco que hay en su mañana".
Por último, el EZLN pide a Cuauhtémoc Cárdenas, derrotado candidato presidencial del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en las pasadas elecciones, y a las organizaciones civiles de la llamada Convención Nacional Democrática a que formen "un gran movimiento amplio de oposición".
En los últimos días, el nuevo secretario de Gobernación, Esteban Moctezuma, se había reunido con Robledo y con Avendaño, cuyos seguidores amenazan con convertir la toma de posesión en una batalla campal en las calles de Tuxtla Gutiérrez, la capital de Chiapas, donde en las últimas horas se concentran miles de seguidores de ambos bandos.
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