Gonzalez pide ayuda a Kolh para no tener que vetar la ampliación de la UE
El presidente del Gobierno, Felipe González, envió, justo antes de viajar a México la Pasada semana, una carta personal al canciller alemán, Helmut Kohl, en la que le pide su ayuda para no verse obligado a vetar la ampliación de la Unión Europea (UE) a tres nuevos Estados miembros (Austria, Finlandia y Suecia) el 1 de enero, según indican fuentes diplomáticas españolas.González se entrevistó conjuntamente el domingo por la noche en la capital húngara con Kohl y con el futuro presidente de la Comisión Europea, el luxemburgués Jacques Santer, pero, según su portavoz, Miguel Gil, no abordó la cuestión de la pesca y en la reunión sólo se evocó el futuro de la construcción europea. Más tarde, Javier Solana, ministro de Exteriores, contradijo al portavoz y aseguró que siempre se habla de pesca".
En la misiva remitida al canciller alemán, que preside la UE hasta final de mes, el jefe del Gobierno español le recuerda que debe cumplirse este mismo año el compromiso político alcanzado por los Doce en marzo de equiparar a partir de 1996 las condiciones de acceso de los pescadores españoles a los caladeros comunitarios con las que disfrutarán las flotas de los nuevos Estados miembros.
El jefe del Ejecutivo recuerda además en su carta que el Congreso de los Diputados instó por unanimidad al Gobierno, el 4 de octubre, a no depositar los intrumentos de ratificación de la ampliación mientras la UE no ponga en práctica la promesa pesquera que hizo a España. González afirma que acatará la recomendación de la Cámara baja.Respuesta para el día 19
Pide, por último, el presidente español a su homólogo alemán que la cumbre europea de Essen, a celebrar los próximos viernes y sábado, reitere el compromiso político adquirido por los Doce con España y que la presidencia alemana de la UE haga un esfuerzo adicional para lograr un acuerdo en el último Consejo de Ministros de Pesca del año, previsto para el 19 de diciembre en Bruselas.
Los negociadores españoles lamentan que hasta ahora la presidencia. alemana no ha actuado con "diligencia", y ni siquiera ha convocado un Consejo de Pesca extraordinario para discutir sobre el contencioso. Sus propuestas de compromiso han sido muy mal acogidas por el Reino Unido e Irlanda. Las posiciones, por tanto, están lo suficientemente alejadas como para que resulte improbable la consecución de un acuerdo dentro de dos semanas, según temen los negociadores españoles.
A preguntas del Partido Popular, el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, confirmó el miércoles en el Pleno del Congreso la voluntad de España en vetar el ingreso de los tres nuevos países si no obtenía satisfacción en pesca. A finales del mes pasado en Oporto, el propio González había declarado ya a la prensa que la proposición no de ley de la Cámara baja sería respetada por el Ejecutivo.
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