Corrida presidencial

Para celebrar la toma de posesión como presidente de México de Ernesto Zedillo Ponce de León se llevó a cabo esta corrida.Aunque por la falta de fuerza del ganado el festejo estaba destinado a fracasar, el oficio de Cavazos y la técnica de Manzanares salvaron la situación. En cuanto a Rondero, dio, la impresión de haberse apresurado a tomar la alternativa.

Eloy Cavazos mostró con creces conocer los secretos de la lidia pero sus maneras carecen de pureza. Con el anovillado segundo hizo una faena bullanguera, pero como el veterano diestro tiene una simpatía arrolladora, inmediatamente conecta con las galerías y éstas lo ovacionan. Lo meritorio fue la verdad con que ejecutó la suerte suprema. La autoridad inexplicablemente se apresuró a donarle el rabo, que el público no pidió, pues su labor no la merecía.

Manzanares, al tercero, que calamocheando iba paso a pasó, le realizó su que hacer con la franela fuera de cacho. Con el quinto el de Alicante emocionó con la tersura de su capote al instrumentar chicuelinas aisladas.

Con el del doctorado, un cornúpeta con poca movilidad pero que humillaba, Rondero se fue a los medios y con gusto toreó por el derecho. El sexto fue el único bravo de la tarde pero, lamentablemente, fue desperdiciado por Rondero que codilleaba al lancearlo.