Aviones rusos bombardean la capital de Chechenia tras el ultimátum de Yeltsin
Aviones rusos al servicio de la oposición chechena bombardearon ayer por tercer día consecutivo los alrededores de Grozni, causando cuantiosas destrucciones y un número no determinado de muertos El ultimátum del presidente ruso, Borís Yeltsin, que exigía a las partes en conflicto que cesaran el fuego, expiró sin que fuera cumplido y sin que, por el momento, el Kremlin se decidiera a imponer el estado de excepción en la rebelde república.
Ayer llegó a Grozni, la capital de la república norcaucásica rebelde, una delegación de la Cámara Baja del Parlamento ruso, encabezada por el presidente de la Comisión de Defensa, Serguéi Yushenkov, para negociar la suerte de los soldados rusos capturados durante el fracasado ataque del sábado pasado.Los aviones de la oposición chechena bombardearon los suburbios de Grozni en la madrugada de ayer y después del mediodía. Seis cazabombarderos que lanzaron misiles contra la viviendas y carreteras del distrito Staroprómisli, al noroeste de Grozni, participaron en el último ataque, según Selimhán Yandarbíyev, vicepresidente de Chechenia, quien agregó que "por lo menos dos aviones fueron derribados".
Además, fueron atacados el aeropuerto de Hankal, en el noreste de Grozni, y el barrio donde vive la familia del presidente Dzhojar Dudáyev. Los manifestantes que ayer se reunieron frente al palacio presidencial pidieron que se ahorcara a un ruso después de cada nuevo ataque aéreo.
El portavoz de Yeltsin declaró ayer que éste "comparte de todo corazón las preocupaciones de los familiares de los soldados rusos retenidos como rehenes en Chechenia" y que está tomando "todas las medidas necesarias para salvar a los soldados". "Bajo el control del presidente, se están emprendiendo una serie de pasos encaminados a sanear la situación en Chechenia y a restaurar en esa república el orden constitucional, la ley y la defensa de los derechos humanos", dijo.
Aunque el portavoz no especificó qué medidas se están tomando, una de ellas puede ser el envío de más de 27 aviones de transporte militar An-12 al aeródromo de Beslán, en Ingushetia, vecina de Chechenia. Estos aparatos, que según' fuentes de la zona aterrizaron allí en la madrugada de ayer, pueden haber llevado entre 1.500 y 3.000 hombres con todos los pertrechos necesarios para los combates, incluidos blindados. Al mismo tiempo, el Ministerio de Defensa reconoció que decidió "enviar unas pocas fuerzas y medios de combate pertenecientes al distrito militar del Cáucaso del Norte a la zona de Mozdok", ciudad ubicada en Osetia del Norte para "defender las comunicaciones y otras instalaciones importantes" e "impedir que el conflicto salga de las fronteras de Chechenia".
Estas fuerzas también "colaborarán con las tropas del Ministerio del Interior en el caso de que se introduzca el estado de excepción en Chechenia". Pável Grachov, titular de Defensa, reconoció que entre los prisioneros capturados durante el ataque a Grozni el fin de semana pasado había soldados rusos.
