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IU y PP reprochan a Leguina que se encele con el Ayuntamiento

Javier Casqueiro

Los dos líderes de la oposición regionales mostraron ayer, en la segunda jornada del debate sobre el estado de la Comunidad, que no quieren volver a los temas que ya trataron cuando eran concejales del Ayuntamiento de Madrid. El responsable del Ejecutivo autónomo, Joaquín Leguina, repitió en cuanto pudo sus ataques a la gestión del PP y el municipio, y por ese flanco recibió contundentes respuestas. La más directa, sin embargo, no vino desde los bancos del PP en la Asamblea. Isabel Vilallonga, portavoz de IU, se levantó de su sillón ya casi al final de la sesión matutina para declarar: "Estoy hasta los pelos del Ayuntamiento, y me parece un desatino institucional que se le esté dedicando tanta atención, porque al final va a parecer que es más importante que la Comunidad".El segundo combate del debate, el que se reserva para los discursos de los portavoces de la oposición y las réplicas del presidente autonómico, duró seis horas, densas y poco brillantes.

Vilallonga empezo por sorprenderse del olvido de Leguína al no señalar que muchos de sus logros lo eran porque los había apoyado IU. El recuerdo de esas omisiones le llevó 33 de los 43 folios que se había preparado. Eso sí, Vilallonga lamentó también algunas vulneraciones de los acuerdos firmados en su día con la Federación Socialista Madrileña. La diputada de IU reprochó al PSOE haber posibilitado el caldo de cultivo del enriquecimiento fácil y la corrupción. En esta línea de reclamaciones protestó por "el permanente baile de delegados del Gobierno en Madrid", que han cambiado cuatro veces de persona en tres años.

Isabel Vilallonga demandó del Consejo de Gobierno no sólo una declaración contraria a la incineradora del Ayuntamiento en Valdemingómez, sino que aplique medidas para evitar lo que calificó como una tropelía del PP".

La portavoz de IU aventuró que su coalición tendrá un papel todavía más determinante en la próxima legislatura, y expresó su deseo de que entonces gobierne la Comunidad como la fuerza mayoritaria de la izquierda. "Porque ni con cien ni con mil propuestas la derecha va a gobernar en esta Comunidad. Los ciudadanos ya saben que el PP no aporta nada, coincide en lo malo y abunda en lo peor".

PASA A LA PÁGINA 2

Ruiz Gallardón dice que con Leguina se vive peor

VIENE DE LA PÁGINA 1Isabel Vilallonga cuestionada en su puesto por los dirigentes locales de su organización, IU- concluyó que no se puede esperar nada del PP, porque allí' donde gobierna no practica políticas adecuadas contra la corrupción (en referencia a la comisión de investigación secreta, en el Ayuntamiento de Madrid sobre las contrataciones de personal) ni "sabe mantener limpia una ciudad". Risas en la bancada del PP.

El presidente regional reprochó a IU no haberse atrevido a formar parte de su Gobierno tras las elecciones de 1991, y se disculpó por no haber destacado la importancia del pacto de investidura con esta formación el día anterior. Incluso en ese momento encontró hueco para meterse con el Ayuntamiento por incumplir el acuerdo para reanudar las obras de las viviendas que acabarán con el poblado chabolista de La Celsa. "Yo creo que las órdenes del alcalde o no se reciben o no se acatan", dijo Leguina.

Alberto Ruiz Gallardón autotitulé al PP como punto de referencia del debate y acusó a Vilallonga y a Leguina de criticar obsesivamente al Ayuntamiento. En este sentido indicó que Leguina había cometido una deslealtad institucional porque no había en la sala nadie del Ayuntamiento para defenderse. "¿Usted se imagina un debate en el que Felipe González se dedicara en el Congreso a meterse con Fraga o Juan José Lucas?", se preguntó Ruiz Gallardón. "Usted ni gobierna ni deja gobernar'', remachó en relación a la oposición regional a los nuevos barrios -70.000 viviendas- que quiere crear el Ayuntamiento.

El líder regional del PP tardó una hora en relatar todas las promesas que, según su criterio, ni PSOE ni IU han sido capaces de ejecutar en estos tres años y medio de legislatura. Tampoco desperdició la ocasión para resaltar los tres grandes casos de presunta corrupción relacionados con la administración que representa Leguina -Renfe, Atocha e Ibercorp- y a ellos añadió como otro gran fiasco, la quiebra del modelo, de cooperativa de viviendas sociales promovido por PSV y fomentado desde la Administración autonómica.

Ruiz Gallardón halló en todos estos casos responsabilidades políticas y morales de distintos altos cargos regionales. El líder autonómico del PP reivindicó un mayor papel de Madrid en el reparto de fondos de las autonomías, y aseguró que Leguina ha desperdiciado mucho dinero de los tres billones de pesetas que ha gestionado en estos 11 años. En este aspecto concluyó: "Los madrileños viven peor en noviembre de 1994 que en julio de 1991 ".

Ideas para el 2000

Al final de su intervención, Ruiz Gallardón trazó un boceto de su programa de Gobierno para el Madrid del año 2000. Habló de dar más competencias y dinero a los ayuntamientos, de reducir la administración regional, de dedicar más presupuesto a la inversión, de privatizar Telemadrid, Onda Madrid y todas las empresas y entes públicos, autonómicos, excepto el Metro y el Canal de Isabel II, y de aprobar un plan de choque contra el paro, con 400.000 millones de pesetas. Ese dinero lo obtendría de privatizaciones, del Estado y de la contención del gasto. Vilallonga y Leguina consideraron. esa idea inviable.

El presidente regional reconoció estar obsesionado con el Ayuntamiento, porque el 50% de la población autonómica vive en este municipio y el 70% trabaja ahí. Ya más crispado, Leguina recalcó la necesidad en los casos de corrupción de demostrar la culpabilidad y no la inocencia de los acusados. Apeló a evitar las actitudes inquisitoriales y en referencia a la Comunidad dijo: "Aquí, como no hay roldanes, intentan hacer gimnasia de mantenimiento".

El presidente regional obtuvo de Ruiz Gallardón el compromiso de respetar las futuras normativas europeas sobre incineracion, que se presumen más restrictivas que las actuales, y el líder del PP, como contrapartida, anunció que entregará un proyecto pactado con el Ayuntamiento sobre la paralizada ley de la capitalidad.

Velocidad del tráfico

Ruiz Gallardón, harto de escuchar las quejas de Leguina por el tráfico de Madrid, quiso aportar un dato para zanjar el asunto. "En 1984 [con Gobierno, PSOE] la velocidad media era de 17 kilómetros por hora, y en 1993 ha sido de 24,04". Fidel Angulo, gerente M Consorcio Regional de Transportes, aseguró que la velocidad media en el casco urbano de Madrid -y no en la totalidad de su término- es ahora de 13,4 kilómetros hora.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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