Ardanza pide al PNV una negociación global con socialistas y EA para formar Gobierno

El lehendakari en funciones, el peneuvista José Antonio Ardanza, planteará a la dirección de su partido que favorezca una negociación discreta y global con socialistas y nacionalistas de EA, de forma que se puedan evaluar con rapidez las posibilidades reales de un Gobierno de coalición a tres. El Partido Nacionalista Vasco (PNV) decidirá hoy la estrategia a seguir en el definitivo proceso de formación de Gobierno que comienza esta semana. Tras los primeros contactos, PNV, PSE y EA se han quedado solos a la búsqueda de un gabinete. Los socialistas, aunque califican de muy difícil esta fórmula, son cada vez menos contundentes en su crítica.La verdadera negociación para formar Gobierno en Euskadi está a punto de comenzar. Los tres partidos celebran hoy reuniones al más alto nivel para nombrar sus comisiones negociadoras. Las reuniones serán discretas y, al parecer, a tres bandas desde el principio. Para Ardanza, el Gobierno fuerte que busca tiene que formarse en torno a esos tres partidos de manera que su unión traspase sin problemas las próximas elecciones municipales e incluso las generales de 1997.

La principal resistencia a vencer será la socialista. Desde la primera ronda han manifestado que un acuerdo a tres es "casi imposible". Sin embargo, la voz de Txiki Benegas en el comité nacional socialista advirtiendo que "no hay que descartarla", y las posiciones más favorables del secretario general de los guipuzcoanos, Jesús Eguiguren, están pesando y cambiando la tendencia, en un partido que de pasar a la oposición se quedaría con lo puesto: 12 parlamentarios. Perdería no sólo la influencia de la presencia en el Gobierno, sino cotas de poder en las tres diputaciones, muchos ayuntamientos y el peso institucional de tener cargos en el Parlamento, Tribunal de Cuentas y muchos otros organismos.

El número de altos cargos y personal de confianza que mantiene el PSE gracias al pacto de Gobierno supera las 150 personas en las tres provincias. Otro obstáculo van a ser los socialistas alaveses, contrarios a que un acuerdo de Gobierno vincule a las instituciones forales y municipales. En Álava, los socialistas quieren tener las manos libres para pactar con Unidad Alavesa o incluso el PP, y así mantener tras las municipales alguna de las instituciones. La exigencia de los socialistas para que el PNV tenga en cuenta que representan más de sus 12 escaños podría tener una respuesta favorable.