Los editores de diarios piden al Gobierno que vuelva a ayudar a la prensa
Crisis publicitaria y alza del precio del papel
La Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE) ha acordado pedir al Gobierno que "preste atención" a los problemas que aquejan al sector de la prensa, derivados de la crisis, del mercado publicitario, la escalada de precios del papel y la competencia de las televisiones públicas. Así lo hizo saber dicha asociación al término de la undécima convención de la misma, clausurada ayer en Palma de Mallorca.Tras un apretado debate sobre la situación de las empresas periodísticas (véase EL PAIS de ayer), el comunicado difundido anoche por el secretario general de la AEDE, Pedro Crespo de Lara, señala que "la crisis del mercado publicitario, la inesperada escalada de los precios del papel prensa y la competencia de las televisiones públicas en materia publicitaria ponen en peligro la calidad y la pluralidad informativas, base del régimen democrático".
Además, en opinión de la asociación de editores, "la ausencia de una política industrial adecuada en el sector estratégico del papel prensa acentúa la gravedad de la situación, al quedar ésta a merced de las fluctuaciones del mercado internacional, de lo que puede seguirse la inviabilidad de algunas empresas periodísticas".
Tras esta exposición, la AEDE finaliza su comunicado pidiendo al Ejecutivo "que preste a esta situación la atención y la sensibilidad que llevaron al Gobierno del presidente González a promover la Ley de Ayudas a empresas periodísticas y agencias informativas de l984". Los editores señalan un punto de referencia: "Las medidas que está poniendo en práctica actualmente el Gobierno francés en favor de las empresas periodísticas para ayudarlas a salir de la crisis".
Las ayudas a la prensa mencionadas en la nota de la AEDE fueron adoptadas por el Gobierno socialista poco después de su acceso al poder. Consistió en una ley por la que se daban a la prensa ayudas directas e indirectas. Estas últimas se adjudicaban en función de la difusión, del consumo de papel y de lareconversión tecnológica.
En cuanto a las ayudas indirectas, consistían en beneficios de carácter tributario, crediticio, postal, de distribución y otros análogos. Las razones de crisis del sector esgrimidas por. el Gobierno entonces para promover la ley de ayudas no fueron tenidas en cuenta en 1988, año en el que se fueron retirando tales apoyos hasta desaparecer en 1990.
En Francia, país pionero en ayudas del Estado a la prensa y que citan ahora los editores españoles como posible modelo a seguir, existen dos tipos de ayuda, según ha explicado en la convención de la AEDE el presidente de la Federación Nacional de Prensa Francesa, Jean Miot. Por una parte existe la ayuda postal, que consiste en tarifas privilegiadas; y en segundo lugar, los apoyos fiscales. Además el Gobierno destina fondos de ayudas especiales como los que repartió el año pasado -casi 5.000 millones de pesetas- para compensar las pérdidas de muchos rotativos.
Los editores franceses están, no obstante, preocupados ante el anuncio del Gobierno de Edouard Balladur, que piensa revisar, las relaciones del Estado con la prensa, para lo cual ha creado cuatro grupos de trabajo.
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