González cree que la economía productiva ha sustituido a la 'cultura del pelotazo'
El presidente del Gobierno, Felipe González, manifestó ayer que se puede dar por clausurada la etapa de la cultura del pelotazo. En una entrevista con Luis del Olmo en el programa Protagonistas, de Onda Cero, González señaló que "se ha pasado la época de la cultura especulativa de la segunda mitad de los ochenta, que se ha vivido también en otros países, no sólo en España". "Las aguas están volviendo a su cauce y ahora se está más en la economía productiva", dijo.González insistió en su voluntad de agotar la legislatura y en su mensaje de continuidad al frente del Gobierno mientras las urnas le sigan dando la mayoría, ante las críticas por su larga ejecutoria. "Las elecciones hay que ganarlas limpiamente. Yo voy a cumplir con mi tarea con gusto y por eso no será fácil que las gane [José María Aznarl". Reiteró que la situación del paro está mejorando, pero añadió que no estaba dispuesto a hacer demagogia. "El problema del empleo no sólo depende de una coyuntura económica mala sino de una estructura que rechaza la generación de empleo en las cantidades suficientes que nosotros necesitamos". A renglón seguido dijo que habría que continuar profundizando en el camino de las reformas estructurales, aunque garantizó que el sistema público de pensiones permanecerá.
Las tensiones interterritoriales contra Cataluña desde sectores conservadores fue otro de los aspectos abordados por González. "Lo hemos vivido y probablemente lo seguiremos viviendo. Eso es un disparate desde todos los puntos de vista. Quizás la gran aportación que podamos vivir en este período sea la de corresponsabilizar en el Gobierno de la nación al nacionalismo moderado catalán. Yo creo que hay menos separatistas que separadores".
La actitud del nacionalismo vasco y de su principal líder, Xabier Arzalluz, tuvo un tratamiento desigual al distinguir González la actitud habitual del presidente del PNV de la que ejerce en época electoral. "Nosotros hemos mantenido un clima de cooperación con el Gobierno vasco desde el punto de vista institucional y el clima ha sido bastante positivo. Hemos logrado una normalización de la vida política del País Vasco y hemos logrado avances sustanciales en la lucha contra el terrorismo". De la batalla electoral dijo, en referencia a Arzalluz, que "la gente empieza a disparatar y a decir cosas absolutamente inaceptables". "Yo no me he dejado arrastrar y desde luego no comparto lo que se ha dicho, que me parecen auténticos despropósitos".
