Los sindicatos amenazan con repetir en Intelhorce protestas como las de Santana

El secretario provincial de CC OO en Málaga, Francisco Gutiérrez, reclamó ayer el apoyo de los malagueños a las movilizaciones que los trabajadores de la Empresa General Textil, antigua Intelhorce, van a realizar contra la decisión de la dirección general de Patrimonio de plantear un expediente de suspensión de pagos y la posterior liquidación de esta empresa con 732 trabajadores. Los sindicatos pretenden que el conflicto en la fábrica malagueña se convierta en una segunda Santana en Andalucía.

Esta posición de rechazo la mantienen a pesar de que el consejero de Trabajo de la Junta, Ramón Marrero, afirmó ayer en Madrid que Patrimonio del Estado le ha asegurado que la actividad no se va a paralizar y que- no se presentará expediente de extinción de contratos.Gutiérrez reiteró ayer, a pesar de las declaraciones del consejero andaluz, que en la reunión que mantuvieron el pasado miércoles los dirigentes sindicales y políticos de la provincia con los responsables de la dirección general de Patrimonio, estos últimos plantearon de una manera "inequívoca" su intención de suspender pagos en la empresa y de presentar un expediente de extinción de empleo para "liquidar en su totalidad General Textil España". "Tenemos que dudar de las intenciones transmitidas ahora por el consejero de la Junta porque nosotros estuvimos en la reunión y está muy claro que quieren que desaparezca la empresa, y no parece probable que haya existido un cambio de actitud", señaló el dirigente sindical.

Ramón Marrero anunció ayer que la Administración autonómica se opondrá a cualquier solución para Intelhorce que no pase por el mantenimiento de la actividad y de los puestos de trabajo, aunque justificó la suspensión de pagos como "una actuación precautoria" para que los acreedores, a los que se adeudan unos 14.000 millones de pesetas -el 95% del total a entidades públicas, según CC OO-, no ejerzan sus derechos y no se ponga en más dificultades a la empresa, al objeto de evitar una quiebra técnica.

Intelhorce debe hacer frente a una sanción impuesta por el Tribunal Europeo que la obliga a devolver 4.200 millones que le fueron concedidos en concepto de subvención, lo que, según Marrero, ha motivado esta decisión de suspender pagos. En términos parecidos se expresó ayer en Sevilla el consejero de Industria, Antonio Pascual, para quien la decisión es la "solución no traumática que permitirá que la actividad y el empleo continúen el día de mañana".

CC OO, que cuenta con mayoría en el comité de empresa de la antigua Intelhorce, trasladará mañana a la asamblea de trabajadores un calendario de movilizaciones "inmediatas" para obligar a Patrimonio a dar marcha atrás. Francisco Gutiérrez reclamó el apoyo de los partidos políticos y de los ciudadanos para salvaguardar uno de los "símbolos" de la escasa industria malagueña: "Lamentablemente, tendremos que convertir el conflicto en la otra Santana de Andalucía, porque se trata de una de las pocas fábricas que da empleo en la provincia y paralizar su liquidación es tarea de toda la sociedad malagueña".