La desigualdad de los sexos es más dramática entre los adolescentes

Para millones de chicas en- el mundo, la adolescencia es uno de los periodos de la vida más peligrosos, ya que a esta edad son a menudo presas de la marginación, la pobreza y el subdesarrollo, lo que las hace fácilmente carne de cañón de la explotación, la discriminación, la violencia y la precariedad de la salud, según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La OMS pone de relieve en el informe La salud de la adolescencia y el desarrollo que las jóvenes a menudo ocupan un lugar inferior en el seno de la familia o en el lugar de trabajo y no tienen las mismas posibilidades de estudiar o de encontrar un trabajo que los chicos. En estas condiciones, los peligros están al acecho: el matrimonio precoz, la prostitución infantil, las mutilaciones sexuales, las violaciones cuando están embarazadas, la violencia y los abusos sexuales. En algunas regiones de Asia la mortalidad materna es cinco veces superior entre las niñas de 10 y 14 años que entre las mujeres de 20 a 24.

Más del 50% de la población mundial tiene menos de 25 años y el 80% vive en el Tercer Mundo. "La sociedad no satisface las necesidades de los jóvenes, y especialmente las de las adolescentes, a pesar del gran coste y los riesgos futuros que ello acarrea", señala el informe, que será discutido a partir de hoy por la comisión mundial de la OMS en Washington, donde intentará elaborar una estrategia para atajar estos males.

La escolarización de las chicas no es tan prioritaria como la de los chicos en muchos países del mundo, ya que se casan jóvenes y no pueden continuar sus estudios. Se estima que entre los 69 países más pobres, sólo llegan a la escuela secundaria entre el 15% y el 35% de los adolescentes.