Buena ópera fuera de tiempo

Tras su estreno en el Festival de Cadaqués el pasado 30 de julio en una versión con orquestación reducida, la ópera Babel 46 de Xavier Montsalvatge recibió en Peralada el definitivo estreno mundial en su versión original.Babel 46 está en una edad dificil. Aunque se estrena ahora, fue compuesta en los años sesenta. A la velocidad con que avanza la música contemporánea, 30 años es una edad dificil para una obra pues no se la puede considerar, en rigor, música radicalmente contemporánea. Tampoco es suficientemente vieja como para gozar de esa especie inmunidad diplomática de la que se benefician las obras de épocas y estilos pasados.

Esta ópera no nació cuando debía. Cuando habría cumplido la función de ejemplo, de termómetro de la música de aquellos años, mientras que naciendo ahora, fuera de su tiempo, pierde fuerza. ¿La culpa? Pues del Liceo de aquellos años, que no la premió y declaró desierto el concurso de óperas en el que participaba; de nuestra peculiar historia cultural y sus protagonistas, de... Hace demasiados años de todo ello, el delito, aunque lo hubo, ha prescrito.

Babel 46, sin ser una gran ópera, es una buena ópera. Dramáticamente ofrece buenas situaciones y nudos, pero falta un desarrollo más amplio y profundizado de estas situaciones. Musicalmente presenta una gran unidad de estilo, que incluye divertidas excursiones a Puccini, no presenta momentos bajos, tiene fuerza dramática, la orquestación es excelente y, por encima de todo, es cantable.

El equipo de cantantes que asumió el reto, en su mayoría jóvenes, funcionó con gran seguridad en todo momento y ello tanto musical como escénicamente. Competentísima la dirección musical de Emest Martínez Izquierdo al frente de la Orquestra Festival de Peralada (Orquestra de Cadaqués) y muy eficaz la dirección escénica de Joan Anton Sánchez.