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Marruecos cree que España acepta ya dialogar sobre Ceuta y Melilla

El primer ministro marroquí, Abdelatif Filali, asegura haber percibido recientemente "posibilidades de diálogo" con España sobre Ceuta y Melilla. En una entrevista a la televisión de su país, el miércoles por la noche, Filali aseguró que, de la entrevista que mantuvo en Rabat con el ministro español de Exteriores, Javier Solana, en julio pasado, sacó la impresión de "que existen posibilidades de abrir un diálogo" sobre Ceuta y Melilla.Preguntado por los proyectos de estatuto de autonomía para las dos ciudades, cuya aprobación contempla Marruecos con recelo, afirmó que "ahora parece que el Gobierno español se inclina hacia el diálogo". Pese a subrayar que "lo más importante es conservar las buenas relaciones con España", agregó que "en esas relaciones hay cosas malas, sobre todo Ceuta y Melilla".

"El problema es difícil pero, sean cuales sean las dificultades, todos los problemas pueden encontrar solución", concluyó, tras anunciar que el próximo noviembre se celebrará en Rabat la cumbre anual prevista en el acuerdo de cooperación y amistad de julio de 1991. La última reunión de este tipo se celebró en Madrid en diciembre pasado.

Posición inalterable

Al concluir la visita a Rabat a la que alude Filali, el jefe de la diplomacia española se limitó a señalar que en sus encuentros con el rey Hassan y el jefe del Gobierno marroquí se hablé "de todos los temas", pues "ninguno quedó fuera de la conversación". Respecto a los estatutos de Ceuta y Melilla, Solana dijo que había "clarificado algunas dudas" de sus interlocutores.Un portavoz del Ministerio de Exteriores se limitó a comentar ayer que "no hay ningún cambio en la posición española [respecto a Ceuta y Melilla], que es perfectamente conocida por las autoridades marroquíes". El rey Hassan propuso en 1987 la creación de una "célula mixta de reflexión" hispano-marroquí sobre el futuro de las dos plazas, que no ha sido contestada oficialmente por parte española.

El contencioso, siempre latente en las relaciones bilaterales, volvió a ser suscitado por el monarca alauita el 3 de marzo, en el discurso conmemorativo del 34 aniversario de su entronización, y desde entonces ha sido planteado repetidamente, aunque siempre en tono moderado, por los responsables marroquíes.

Estas alusiones han coincidido con el desbloqueo de los estatutos de las dos ciudades, que fueron estudiados por el Consejo de Ministros en su última reunión antes de vacaciones, y con el anuncio por parte de la ONU de que el referéndum de autodeterminación del Sáhara se celebrará en febrero de 1995.

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En la misma entrevista, Filali acusé al Polisario de no querer el referéndum y de intentar sortear el plan de la ONU para imponer a la Organización para la Unidad Africana (OUA), con la que rompió Marruecos en 1984 tras la admisión de la República Árabe Sahaaui Democrática.

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