Baleares teme un nuevo fin de semana caótico por la huelga de los controladores de Marsella

Una nueva huelga (esta vez de celo) de los controladores aéreos franceses del centro de Marsella amenaza con volver a entorpecer durante este fin de semana la actividad de los aeropuertos de Palma de Mallorca, Ibiza y Menorca. Un total de 290.000 pasajeros y 1.816 vuelos, el tráfico de turistas y aeronaves más elevado de la temporada, puede sufrir las consecuencias de los paros convocados por los técnicos franceses, que reclaman mejoras en el convenio del sector.

El Gobierno y empresarios de Baleares han adoptado medidas para facilitar la fluidez de las operaciones, aunque ayer, primer día de la huelga de celo, no pudieron evitar retrasos de una hora en las salidas por Burdeos y Marsella.

En el aeropuerto de Palma de Mallorca funcionará una oficina de crisis que atenderá todas las incidencias que se puedan registrar este fin de semana. La estrategia será similar a la seguida en el desarrollo de la huelga de hace siete días, que causó retrasos de hasta 14 horas y afectó a 300.000 pasajeros y 2.000 operaciones aéreas en toda Baleares.

Medidas

También como la semana pasada, los hoteles retendrán a los turistas en los establecimientos hasta que estén asegurados los vuelos, y los mayoristas trasladarán a los pasajeros afectados a centros recreativos tras completar los trámites de facturación de equipajes. El ministro de Transportes y Obras Públicas, José Borrell, seguirá personalmente las incidencias de la huelga de celo trasladándose este fin de semana a Palma de Mallorca. El sector turístico de Baleares aprovechará la visita de Borrell para solicitarle que defienda en los organismos comunitarios de Bruselas un tratamiento prioritario para el transporte aéreo insular.Las compañías privadas españolas han logrado el apoyo del centenar de empresas del ramo que operan en Europa para suspender el pago de las tasas anuales al organismo comunitario Eurocontrol. Ello supondría retener alrededor de 100.000 millones de pesetas, de los cuales 10.000 salen de las arcas de las seis compañías españolas (Air Europa, Spanair, Oasis, LTE, Futura y Centennial).

El director general de ese organismo Yves Lambert, recibió el jueves a una delegación balear pero no aportó ninguna solución concreta, debido a que Eurocontrol no tiene asignadas las competencias sobre la gestión única del espacio aéreo europeo. Además, España no es, todavía, miembro de pleno derecho de Eurocontrol.