La creación de la primera agencia privada de colocación rompe el monopolio del Inem

El Inem ha perdido ya el monopolio en la colocación de trabajadores con la puesta en marcha del Centro de Información y Servicios Empresariales (CISE). Se trata de la primera agencia privada de empleo sin ánimo de lucro creada al amparo de la reforma laboral. Pese a que está pendiente el desarrollo de la normativa, el proyecto está funcionando experimentalmente, promovido por la patronal de Lugo y se va a extender a toda Galicia con 10 centros previstos para 1994. Los empresarios quieren negociar con el Inem el acceso a su base de datos de ofertas y demandas de empleo.

La reforma laboral ha roto un tabú y ha dado vía libre para la creación de empresas privadas de colocación, aunque precisa que han de funcionar sin ánimo de lucro. Ello limita la constitución de esas agencias a fundaciones, patronales, sindicatos o instituciones públicas. La patronal de Lugo, sin esperar al desarrollo de la normativa, ha puesto en marcha ya la primera empresa que compite con el Inem en su función de buscar trabajo a los parados o a demandantes de un nuevo empleo.José María López, secretario general de la patronal de Lugo y uno de los promotores del proyecto, afirma que "la idea es comprometer al empresario en la lucha contra el paro; contra una lacra social que afecta al 24,5% de la población activa. Si no lo hacemos los empresarios, no lo hará nadie".

Inicialmente van a trabajar, sobre todo, con jóvenes menores de 25 años y parados mayores de 45 años. A los primeros, para insertarlos en el mercado de trabajo. A los segundos, para ayudarles a cambiar de profesión y reorientarlos.

Esa organización empresarial venía trabajando desde hace tiempo en temas de empleo y en el plan FIP (formación e inserción profesional), pero esa tarea se le quedó "coja" y faltaba oferta de empleó. Por ello han puesto en marcha el Centro de Información y Servicios Empresariales (CISE), una de cuyas tareas es impartir cursos de formación en áreas diversas, como comercial, carpintería y fontanería, sobre todo en sectores que hay demanda.

Para conocer las necesidades de los empresarios, realizan un estudio cuyo campo de información son 4.000 empresas. Así pretenden detectar las carencias de profesionales para crear una bolsa de trabajo que enviarán a las empresas.

Debido a la obligatoriedad de que no haya ánimo de lucro, no cobran nada al desempleado ni a la empresa y la agencia de colocación se financia con las cuotas de los afiliados a la patronal gallega. José María López asegura que, cuando tengan mayor dimensión, deberán asignar más personal y recursos y por eso negocian un acuerdo con la Xunta de Galicia para obtener fondos procedentes de la promoción de empleo. También han presentado su proyecto a la patronal estatal CEOE con el objetivo de que negocie un convenio nacional con el Inem para poder manejar sus bases de datos de ofertas y demandas de empleo.

A la espera de esos apoyos, van a abrir de inmediato una delegación en La Coruña y otras en las capitales gallegas y pueblos más pequeños, de forma que haya 10 centros abiertos en 1994. Los datos del CISE de Lugo son todavía cortos; de los 22.000 parados que hay en la provincia, su base de datos alcanza a 2.000 desempleados, un 10%. Disponen de un local de 300 metros cuadrados en el centro de la ciudad, de personal administrativo y un psicólogo, dirigidos por Raquel Magán, una licenciada en derecho y experta en relaciones laborales, Raquel Magán.