EE UU suaviza las sanciones contra Corea del Norte para obtener el apoyo de la ONU

La Administración norteamericana, tratando de atajar las críticas de que está actuando tarde y débilmente con Corea del Norte, tiene previsto presentar la próxima semana ante el Consejo de Segu ridad de Naciones Unidas un paquete de sanciones económicas contra ese país, aunque dichas medidas serán más suaves de lo que Estados Unidos hubiera deseado con el fin de conseguir el apoyo de los demás miembros del Consejo.

El presidente Bill Clinton ha mantenido este fin de semana varias consultas con sus asesores de seguridad con objeto de elaborar un calendario de actuación sobre Corea que demuestre que la Casa Blanca no ha perdido la iniciativa en esta crisis. Como parte de esos esfuerzos, Clinton habló el viernes por teléfono con el presidente de Corea del Sur, Kin Young Sam, para coordinar los pasos que son necesarios para hacer frente a la situación.Estados Unidos y Corea del Sur están trabajando juntos, se gún informó el viernes un alto funcionario del departamento de Defensa, Ashton Carter, en la identificación y protección de los puntos geográficos surcoreanos más susceptibles a convertirse en blancos de un eventual ataque nuclear del norte. Carter dijo que los norcoreanos ya disponen de al menos dos armas nucleares, que pueden utilizar en cualquier momento, y han acelerado los esfuerzos para disponer de más en un futuro inmediato.

Ante la verosimilitud de ese riesgo, varios miembros de la oposición republicana han advertido al presidente que debe empezar a preparar al país a hacer frente al peligro de guerra en la península de Corea.

Inspectores expulsados

El Gobierno de Corea del Norte, además, ha endurecido en las últimas horas su posición al anunciar la expulsión de los dos únicos funcionarios del Organismo ,Internacional de la Energía Ató mica (OIEA) que quedaban en Pyongyang, así como al advertir que ya no está en condiciones de garantizar medidas suficientes de seguridad en sus plantas nucleares.

La crisis entre Estados Unidos y Corea del Norte se agudizó hace diez días, después de que el OlEA certificase que el régimen comunista norcoreano no le permitía comprobar si utilizaba o no sus plantas nucleares para la fabricación de bombas atómicas.

El presidente Bill Clinton trata, no obstante, de agotar las últimas posibilidades de una solución negociada antes de que aumente la tensión bélica. Dentro de esos esfuerzos destaca la gestión que el ex presidente Jimmy Carter realizará la próxima semana en Pyongyang. Carter se reunirá a lo largo de este fin de semana con altos funcionarios de la Casa Blanca para precisar el carácter de la gestión de mediación que el ex presidente llevará a Corea de Norte. Ninguna información concreta se ha facilitado aún al respecto.

Carter se entrevistó el viernes en Atlanta con, el emperador de Japón, un país de influencia clave en la política hacia Corea del Norte. El emperador Akihito y la emperatriz Michiko iniciaron en esa ciudad una gira de dos semanas que incluirá la primera visita formal de Estado que se produce en Washington desde que Clinton es presidente. Para ganar el apoyo de Japón, el Gobierno norteamericano parece dispuesto a que las sanciones de la ONU no incluyan el dinero que la influyente comunidad norcoreana de Japón envía a sus familiares en su país de origen.