Rechazados tres toros de Baltasar lbán

Tres de los seis toros que trajo Antonio Vaamonde, representante de la divisa de herederos de Baltasar Ibán, anunciada para hoy, fueron rechazados ayer en el reconocimiento veterinario. Vaamonde intentará completar la corrida hoy trayendo más toros, aunque señaló que no cree tenga en la finca más de dos con el trapío que se exige en Madrid.La terna que actuará frente a ellos no alcanzó en su anterior compromiso en el abono el éxito que deseaba, por lo que Emilio Muñoz, César Rincón y Juan Mora coinciden en señalar que hoy deben salvar su feria, para lo que confían en los toros de Ibán, que son muy de su agrado.

Quien más cerca estuvo de lograr el triunfo en su anterior compromiso isidril fue Rincón, quien el pasado día 27 de mayo dio vuelta al ruedo tras la muerte de su primer toro. "Pero no me basta ese balance", adelanta, "porque si no triunfo aquí, ante mi público y en la plaza que me ha dado todo, ya puedo coleccionar éxitos en otros cosos, que la temporada estará semivacía".

El colombiano, tras advertir que no entiende porqué otras figuras rehúyen los toros de Ibán, explica las razones de que le gusten tanto: "Se prestan mucho a mi tipo de toreo de distancia, porque se caracterizan por no caerse, por tener casta y por repetir sus embestidas".

Juan Mora expresa su esperanza en que los toros de esta tarde no le defrauden como le ocurrió con los de Puerto de San Lorenzo, que lidió el pasado día 20 de mayo con un balance de silencio y pitos. "Necesito refrendar aquí mis éxitos en otras plazas las dos temporadas anteriores", confiesa, "y no porque se vayan a poner en duda, sino porque reconozco que mi cotización moral y económica bajaría si hoy fracaso en este objetivo. Además hora va siendo de sacarse la espina de Madrid después de "temporadas de alternativa".

Similar expresión utiliza Muñoz, que cuenta con tres lustros de alternativa en los cuales no ha cortado ni una oreja en Las Ventas. El sevillano, también reconoce que "nadie puede sentirse figura sin haber triunfado en Madrid. Por tanto, como es mi auténtica obsesión, tendré que lograrlo hoy, porque la feria se me va en blanco otra vez".

Su único miedo es que luego no mate los toros anunciados, como ya le ocurrió en su anterior compromiso: "Te mentalizas para unos toros que te gustan", concluye, "y luego matas otros, o sobreros. A mí, desde luego eso me influye negativamente".