El PSOE pide que no se le castigue en las europeas porque tendrá consecuencias nacionales

ANABEL DIEZ El PSOE tiene que vencer hasta el 12 de junio a dos enemigos que están en pie de guerra: la abstención y el deseo de ciudadanos de izquierda de propinar a los socialistas un voto de castigo, al considerar que no se han cumplido las promesas que el secretario general del PSOE, Felipe González, hiciera en la campaña de las generales de 1993. Los socialistas quieren transmitir la idea de que un voto de castigo sería doblemente negativo. Primero, porque no sería "gratis", sino que tendría consecuencias internas, y segundo, porque un revolcón electoral dejaría al Gobierno en situación de debilidad frente al Partido Popular, según miembros del comité de estrategia, que se reúnen hoy para analizar la campaña.

Cinco días después de empezar la campaña, a los socialistas ya no les importa reconocer que estas europeas tienen una incidencia nacional determinante. Distintas encuestas electorales están en marcha en estos días, aunque la última con la que cuentan todos los partidos, procedente del CIS, sigue colocando al PP por delante del PSOE. Dicha encuesta, realizada entre el 12 y el 16 de mayo, da al PP un 22,3%; al PSOE, un 20,4%; y a IU un 11,3%.El presidente del CIS, Joaquín Arango, precisa que estos resultados tienen que ser analizados con cautela porque "no se les ha aplicado el modelo de estimación" y "las diferencias pueden ser mayores".

La abstención y los deseos de propinar un voto de castigo al PSOE son los peligros reales con los que se enfrentan los socialistas. Los índices de participación que dan ahora las encuestas no superan el 55%, declarándose de izquierda la mayoría de los que reconocen que no votarán. Los encargados de la estrategia del PSOE reconocen, y se pondrá de manifiesto en sus mítines, que estas elecciones tienen una recupercusión nacional importante. Eso sí, lo harán achacando al PP la responsabilidad de "desvirtuar las elecciones europeas para desestabilizar al Gobierno".

Hoy, reunión

Los miembros del comité de estrategia -formado por Cipriá Ciscar, Txiki Benegas, Joaquín Almunia, Raimon Obiols y Francisco Fernández Marugán- se reunirán hoy poco antes de que el secretario general del PSOE, Felipe González, celebre un mitin en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), en el que introducirá los nuevos mensajes que dicho comité establezca. No obstante, los miembros del comité precisan que González no siempre atiende las directrices de campaña.

A partir de ahora, las permanentes referencias al carácter franquista e incluso "fascista" que atribuyen al PP se aminorarán, aunque costará cierto esfuerzo, ya que los militantes "se mueven con soltura en ese discurso", reconocen miembros del comité. Ayer mismo, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ilustró a 200 escolares sobre los horrores del franquismo, informa Servimedia.

"Hubo un tiempo en el que era delito opinar, en el que no había libertad, en el que los españoles no pudieron convivir y se mataron entre sí". Barreda señaló que hay gente que no quiere hablar de estas cosas pero él, como historiador, afirma que "la primera lección es que un pueblo que olvida su Historia está condenado a repetirla".