Seis policías colombianos mueren en Medellín en un atentado con bomba
Pocos minutos duró la celebración del 4-0 que la selección colombiana de fútbol endosó el domingo al Eintrach de Francfort en Medellín. A las las siete de la tarde, un aterrador estruendo recordó las jornadas cruentas del narcoterrorismo. Dos oficiales y cuatro agentes de policía que se desplazaban en la patrulla identificada con el número 602 murieron a consecuencia de la onda expansiva de unos 600 kilogramos de dinamita accionados con control remoto desde 100 metros de distancia, según las primeras investigaciones.Otros 10 agentes resultaron heridos en el atentado que el jefe de policía de Medellín, general Luis Ernesto Gillibert, consideró como un episodio más de los " 15 años de guerra" en la segunda ciudad de Colombia, en la que, dijo, "la policía es el blanco más fácil porque tiene que estar presente en todas partes".
El atentado se atribuye a la Coordinadora Nacional Guerrillera, aunque Gillibert admitió que también podría provenir de los reductos del cartel de Medellín activos tras la muerte, el 2 de diciembre de 1993, de su máximo jefe, Pablo Escobar.
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