"Primero los franceses, después los rusos"

"Primero los franceses, después los rusos", aseguraba hace pocos días en Argel un diplomático comunitario refiriéndose a los blancos preferidos por los integristas ilámicos.Dentro de esta lógica, los atentados contra los súbditos franceses tienen como objetivo principal estrangular la colaboración económica que pueda prestar París, mientras que con los atentados contra los ciudadanos rusos se intentaría impedir o poner trabas a la cooperación militar.

Este diplomático efectuaba sus reflexiones en voz alta hace poco más de una semana, poco después de que se conociera el asesinato de los dos religiosos franceses en la alcazaba baja de Argel.

El diplomático vaticinaba la posibilidad de que la próxima víctima de la violencia integrista fuera un ciudadano ruso. Las circuntancias que rodean a este atentado plantea a los países de la Unión Europea el problema de la seguridad en las grandes obras públicas, en las que se encuentran comprometidas varias empresas internacionales. Muchas de ellas se encuentran unilateralmente paralizadas desde el pasado mes de diciembre.

La decisión de dejar las obras momentáneamente fue adoptada tras conocerse el asesinato de los doce técnicos croatas que trabajaban en el desvío de un río en la localidad de Tamesguida, a poco menos de 50 kilómetros de Argel.

Esas obras se desarrollaban cerca de una base del Ejército, pero los integristas lograron infiltrarse entre las tropas y llegar hasta el campamento de los extranjeros.

Diversas empresas de obras públicas internacionales se venían planteando recientemente la posibilidad de volver a Argelia, después de haber constatado una aparente situación de calma en el país y haber recibido asimismo por parte de las autoridades argelinas garantías para mejorar las condiciones de seguridad de sus trabajadores.