Rubio y De la Concha, trasladados de cárcel "para garantizar su integridad"

Mariano Rubio, ex gobernador del Banco de España, y Manuel de la Concha, ex síndico de la Bolsa de Madrid, fueron trasladados ayer desde la prisión de Carabanchel hasta la de Alcalá-Meco, también en la provincia de Madrid, por orden de la Secretaría de Estado de Asuntos Penitenciarios, que adujo en una nota motivos de seguridad. "Con el fin de garantizar al máximo su integridad fisica", se asegura, y ante "la aparición de informaciones en las que se señalaba que podían ser objeto de agresiones" por otros internos de Carabanchel.

Rubio y De la Concha llegaron a la cárcel de Alcalá-Meco, a unos treinta kilómetros de Madrid, entre las nueve y las nueve y media de la mañana de ayer, y quedaron ingresados en un pabellón de presos preventivos. Se ignora si han quedado recluidos en celda doble o individual.La nota oficial ofrece bastantes detalles de la situación de los detenidos tras su traslado. Se asegura que la decisión les fue comunicada a ambos el viernes por la noche y que ayer, tras llegar a Alcalá-Meco, fueron reconocidos por los servicios médicos y, "conforme establece la legislación penitenciaria", hablaron con sus familias, "con quienes comunicaron a lo largo del día".

La misma información de Asuntos Penitenciarios asegura que ambos "se entrevistaron con sus letrados", y añade que "su estado anímico se encuentra dentro de la normalidad, si bien ambos están bajo el tratamiento farmacológico que les fue prescrito". No se especifica el tipo de tratamiento, y se añade que "el trato que reciben es absolutamente normal, sin que gocen de privilegio alguno".

El traslado originó un primer problema a las familias de Rubio y de De la Concha, ya que se hizo necesario renovar la petición de visita que ya tenían acordada para Carabanchel. Elena y Emilio de la Concha, hijos del ex síndico de la bolsa, visitaron ayer a su padre, pero será hoy, domingo, cuando las esposas puedan ver a ambos reclusos por primera vez desde que fueron detenidos, el miércoles sobre las nueve de la noche.

En tomo a la prisión de Carabanchel existía ayer gran expectación en torno a la visita de Carmen Posadas e Isabel Falabella, esposas de Rubio y De la Concha, respectivamente. Docenas de informadores se trasladaron a las puertas de la cárcel de AlcaláMeco cuando se conoció el traslado de los dos presos.

Miguel Bajo, defensor de De la Concha, declaró a Europa Press que no les fue comunicado el cambio, por lo que tuvieron que enterarse llamando a Carabanchel, aunque añadió que este tipo de traslados es normal para mejorar las condiciones de detención.

El letrado de Rubio, Gonzalo Rodríguez Mourullo, presentó al mediodía de ayer un recurso contra el auto de prisión de su cliente. Por el secreto del sumario no se ha dado a conocer el contenido del recurso, pero, según Europa Press, se basa en que existen instrucciones de la fiscalía de que no se investiguen fraudes fiscales inferiores a los 15 millones -de acuerdo con la reforma prevista del Código Penal- mientras que Rubio está acusado de defraudar a Hacienda 6.180.000 pesetas.

También se ataca en el recurso la forma en que se llevó la detención, por orden del fiscal, y la competencia del juez de guardia para dictar el auto de prisión, en vez del magistrado que instruye la causa contra Rubio.

El presidente de la asociación Jueces para la Democracia, Cándido Conde Pumpido, declaró ayer que el método seguido para la detención de Rubio y de De la Cocha es "perfectamente legal", ya que, tras la fuga del ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán, no está de más adoptar medidas para evitar la repetición de sucesos semejantes.

Conde Pumpido declaró a Servimedia que "el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra y en este caso la fiscalía ha querido evitar el mismo tropiezo".