La Caixa presta 1.000 millones a Tibigardens para la nómina y proveedores

La Caixa ha concedido un crédito de 1.000 millones de pesetas a Tibigardens, sociedad promotora del parque de atracciones de Tarragona, gracias al cual ha podido hacer frente al pago de los salarlos del pasado mes de abril y de los proveedores más urgentes. A pesar de ello, Tibigardens ha pagado sus nóminas con retraso.

Este crédito de emergencia ha cubierto los 1.000 millones de pesetas que De la Rosa desvió de la caja de Tibigardens, dejando a cambio cinco pagarés de Grand Tibidabo y de otras de sus sociedades. Esta operación motivó la reacción airada de los socios minoritarios de Tibigardens, la multinacional Anheuser Busch, los futuros accionistas, la propia Caixa y el grupo Pearson, que expresaron su enfado al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol.

Las dificultades financieras de Grand Tibidabo, presidida por De la Rosa y propietaria del 70% de Tibigardens, han impedido que el financiero devolviera el dinero y retirara los pagarés.

De la Rosa tiene intención de abandonar la presidencia de la sociedad, junto con sus más estrechos colaboradores, como el abogado Juan Piqué, a fin de no hacer frente a una junta de accionistas potencialmente explosiva. La sociedad Gran Tibidabo cuenta con un total de 9.000 pequeños accionistas. El nuevo presidente que De la Rosa ha elegido para Grand Tibidabo es Joan Cruells, hasta ahora director general.

El financiero ha intentado durante las últimas semanas encontrar un comprador para su paquete del 30% en Grand Tibidabo. La sociedad tiene unas deudas consolidadas de 43.000 millones de pesetas y durante 1994 registró pérdidas de 605 millones, que se incrementarán con toda probabilidad cuando finalicen los informes de la auditoría.

La Caixa ha concedido este crédito como pago adelantado por la compra de su participación en Tibigardens. Esta semana , La Caixa y el grupo británico Pearson, formalizarán la adquisición del 70% de Tibigardens, con lo que De la Rosa desaparecería del proyecto.