Dos de cada tres contribuyentes de renta tendrán derecho a devolución este año
Los contribuyentes del impuesto sobre la renta a quienes la declaración les salga a devolver obtendrán este año de Hacienda una media de 94.117 pesetas. En esa situación estarán dos de cada tres declaraciones, que colocarán a la Administración tributarla en una posición deudora. El trago de presentar la declaración de renta resulta así cada vez más llevadero. Y este año todavía más si, como se ha comprometido la Agencia Tributaria, las primeras devoluciones se adelantan al mes de julio. La actual campaña se presenta, por otra parte, con escasas novedades en cuanto a las deducciones y con unos impresos más detallados.
Según los datos que maneja Hacienda, habrá este año cerca de nueve millones de declaraciones con derecho a devolución -cuyo plazo acaba el 30 de junio-, frente a casi cuatro millones positivas -cuya presentación finaliza el 20 de junio-. Éstas pagarán a Hacienda una media de 177.621 pesetas frente a las 94.117 pesetas como media de devolución. El saldo es negativo para la Administración en cerca de 150.000 millones de pesetas.La mayoría del total de declaraciones esperadas -cerca de 13 millones- optarán este año por el sistema individual (7,29 millones), a pesar de que la tarifa es más elevada que la conjunta. La razón es que sólo hasta un determinado nivel de ingresos compensa presentar la declaración conjunta. Los asesores fiscales indican, sin embargo, que no se puede dar una pauta general. Depende de la diferencia de ingresos entre los distintos miembros de la unidad familiar, de si trabajan o no los dos cónyuges y de las deducciones que uno u otro se puedan aplicar. El primer consejo es, en cualquier caso, que se pierda un poco de tiempo en hacer varios borradores con los dos modelos y presentar el que resulte más ventajoso.
Prácticamente la única novedad con la que se van a encontrar los contribuyentes este año son los impresos. En la declaración simplificada (la que utilizan la mayoría de los contribuyentes y este año, por primera vez, unos 800.000 agricultores) habrá una casilla especial donde figurará la base sobre la que se aplica la deducción. Por ejemplo, si se trata de gastos de enfermedad, habrá que poner en un lado el total y en otro el resultado de aplicar el 15% que le corresponde como deducción.
Novedades
Habrá otra casilla especial para aquellos contribuyentes que hayan invertido en una cuenta vivienda, donde tendrán que escribir la fecha de apertura. Se trata así de verificar que, efectivamente, la cuenta vivienda no tiene más de cuatro años de antigüedad, motivo por el cual perdería el derecho a la deducción del 15% en la cuota.Otra novedad es que los separados o divorciados mediante sentencia judicial tendrán que dar más datos sobre las pensiones o anualidades percibidas o pagadas. Habrá una nueva casilla para que el pagador especifique el nombre del perceptor de esta renta y éste tendrá también un apartado especial para consignar la pensión concreta. Las cantidades así percibidas tributan como rendimiento del trabajo, salvo las destinadas al mantenimiento de los hijos.
Tanto la tarifa como las deducciones del impuesto no han sufrido modificaciones este año, es decir, no se ha tenido en cuenta el efecto de la inflación, lo cual supone un aumento indirecto de la carga fiscal. La razón es que se trata de un impuesto progresivo y se paga proporcionalmente más cuanto más se gana. Por ello, parte del aumento salarial que hayan percibido los contribuyentes se lo quedará Hacienda por esta vía.
En cuanto a las deducciones, la novedad es que desaparecen dos de ellas. Se trata del 10% que se aplicaba a las donaciones relacionadas con los acontecimientos de 1992 y las que disfrutaban determinados contratos de seguro de vida. El resto de las deducciones permanecen tal y como estaban el año anterior.
