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Leguina funda una corporación industrial para luchar contra el paro

José Manuel Romero

Joaquín Leguina, presidente de la Comunidad de Madrid, abrió ayer una senda nueva en la lucha contra el declive industrial que sufre la región. Su Gobierno regional destinará dinero público a comprar participaciones -"en una proporción generalmente minoritaria y por un espacio de tiempo limitado"- en pequeñas y medianas empresas "no financieras".Leguina promueve así la primera corporación industrial que tendrá la Comunidad de Madrid a través de una sociedad de capital-riesgo en la que también participará Caja Madrid. Es la medida más novedosa de cuantas aprobó ayer el Consejo de Gobierno para busar una salida a la crisis industrial que afecta a la región desde el tercer trimestre de 1992.

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Un plan

La inversión de capital público en una industria en crisis, según el consejero de Economía, José Luis Fernández Noriega, permite "reforzar los fondos propios de esa empresa, reduciendo sus costes financieros y situándola en mejores condiciones de competencias".

Pero los socialistas no quisieron adelantar ayer cuánto dinero piensan dedicar a este plan ni cuándo empezará a ejecutarse. "Las negociaciones con Caja Madrid para montar la sociedad están muy adelantadas", explicó Leguina. La Administración central, según el presidente madrileño, también podrá aportar fondos a la nueva corporación industrial.

Hasta el momento, la Comunidad de Madrid tan sólo subvencionaba o avalaba a empresas en crisis sin participar en su accionariado. Con la nueva sociedad de capital-rlesgo, la Administración regional se convierte en parte interesada y puede recuperar su inversión si la empresa obtiene beneficios.

Ahora que los bancos privados, como el Santander, tienen intención de abandonar su participación en el sector industrial, algo que ayer criticó Fernández Noriega, la Comunidad de Madrid pretende llenar este vacío.

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La Comunidad pide al Estado mayores ayudas para los distritos y municipios mas deprimidos

Leguina reiteró ayer su apoyo a las reivindicaciones sindicales y criticó la política industrial aplicada en España durante los últimos años. "Los vientos liberales que soplaban en Europa hicieron que todos fueran demasiado optimistas. Se descuidó la economía real en beneficio de la ingeniería financiera, que es una chorizada porque no se come de eso sino de lo que se produce", remarcó el presidente madrileño.El Ejecutivo regional ha solicitado al Ministerio de Economía que califique a los municipios periféricos y a los distritos que más sufren el declive industrial (Vallecas, Villaverde y San Blas) como "zona asistida". Esta categoría haría posibles más ayudas regionales y nacionales para las fábricas ubicadas en estas zonas.

Leguina comentó ayer: "No es justo decir que Madrid sea una zona rica", en referencia a la decisión de la Unión Europea de no aprobar ayudas para las capitales. "Madrid es una realidad compleja donde hay zonas deprimidas y donde se está perdiendo peso industrial. El día en que Franco metió a Villaverde y Carabanchel en Madrid con el único fin de que fuera más grande que Barcelona, no se enteró que nos hacía esta faena", añadió.

Momento crítico

Los dirigentes socialistas aseguraron ayer que "lo de Santana Motor [fábrica de Linares que desde hace meses sufre una grave crisis] es una broma en comparación con esto [Madrid]". 8.000 trabajadores, repartidos en una veintena de industrias localizadas en la región de Madrid, sufren desde hace algunas semanas la amenaza de cierre de sus fábricas y la cercanía a las listas del desempleo. "De todas las empresas con problemas, el único agujero negro es Ebro Kubota", reconoció Fernández Noriega. "Pero todavía estamos negociando para encontrar una solución satisfactoria". Leguina recalcó que su Gobierno no ha olvidado a estas fábricas en dificultades sino que "todos los días del año" están tratando sus problemas.

En la región se ha destruido el 30% del empleo industrial en los últimos cinco años, según los sindicatos UGT y CC OO. Y en lo que va de año se han perdido 11.000 empleos industriales en la región. Unas 400 empresas madrileñas están afectadas por la crisis, entre ellas Ebro-Kubota, Rank Xerox, SKF, Telyco y Amper.

El Ejecutivo madrileño también aprobó ayer nuevos programas para favorecer la creación de puestos de trabajo: un plan integral de empleo en colaboración con el Inem, un programa marco de ayudas a empresas y la potenciación del Instituto Madrileño de Desarrollo. La Consejería de Economía facilitará la consecución de préstamos participativos (a largo plazo y amortizables al final del vencimiento) a las firmas.

Leguina explicará todas estas medidas a la patronal y los sindicatos madrileños durante la próxima semana. Su equipo de Gobierno advierte una "situación económica muy esperanzadora en los últimos indicadores como la cartera de pedidos del sector de la construcción. El consejero de Economía, además, afirma que "sólo el catastrofismo puede desanimar la inversión".

Los sindicatos no quisieron ayer hacer valoraciones sobre el fondo de las propuestas del presidente; prefieren esperar a que hoy el mismo Leguina se las explique en todas sus vertientes, informa Inma Ruiz. Sin embargo, CC OO no dudó en descalificar la forma elegida por Leguina para hacer las propuestas: "Es inadmisible que el pasado martes hubiera una reunión de la mesa por la Industria y el Empleo y no se dijera nada sobre esos asuntos, y que mañana [por hoy] se vaya a reunir Leguina con los dirigentes de los sindicatos y no haya esperado a esa reunión para comunicarles los planes; no parece lógico que, teniendo esas reuniones con los responsables de la Comunidad, los sindicatos tengamos que enterarnos por la prensa de unas cuestiones de esa trascendencia", dijo Francisco Naranjo, portavoz de Comisiones Obreras.

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